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Miles de manifestantes clamarán este martes en Alicante contra el recorte del trasvase Tajo-Segura que planea el Gobierno. Asaja-Alicante ha promovido una concentración ... ante la Subdelegación del Gobierno para protestar por el nuevo plan de cuenca del Tajo que conlleva disminuir en cerca de 105 hectómetros cúbicos anuales la transferencia.
La protesta ha sido convocada por Asaja-Alicante, el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), Riegos de Levante Margen Derecha, Riegos de Levante Margen Izquierda y Junta Central de Usuarios del Vinalopó. Los organizadores han hecho un llamamiento a la sociedad para que participe en la concentración que contará con la presencia de políticos del Consell y de los principales partidos.
Se calcula que el recorte del trasvase puede terminar con más de 8.000 empleos directos y miles de indirectos, así como supondría la destrucción de 12.000 hectáreas de campos de cultivo en Murcia, Alicante y Almería. Además, la pérdida del valor de la producción rondará los 122 millones de euros anuales.
Un estudio de la Cátedra de Competitividad del Colegio de Economistas, la Universidad de Murcia y la Politécnica de Cartagena (UPCT) señala que la desaparición del trasvase tendría un efecto demoledor para la economía del sur de la Comunitat, Murcia y Almería. Supondría la desaparición de más de 43.000 empleos, una pérdida de producción de 1.740 millones de euros y una reducción del Valor Añadido Bruto (VAB) de 802 millones de euros.
Los convocantes protestan contra la reciente aprobación por el consejo del agua de la demarcación del nuevo plan del Tajo. Este documento incluye la elevación de los caudales del río que implican una disminución del agua disponible para el trasvase en unos 105 hectómetros cúbicos anuales.
Ahora el documento debe ser aprobado por el Consejo del Agua a nivel nacional y someterse a un dictamen del Consejo de Estado. Finalmente llegará al Consejo de Ministros donde adoptará la forma de un decreto ley para su posterior entrada en vigor.
El nuevo plan del Tajo ha puesto en pie de guerra a los regantes del trasvase que avisan que supondrá una catástrofe económica para el sur de la Comunitat, Murcia y Almería.
Además, la aprobación de este documento ha puesto en una difícil posición al Consell y especialmente al PSPV ya que la propuesta ha sido impulsada por un gobierno de su mismo partido político. Los socialistas han reiterado su apoyo a la transferencia y su oposición al recorte. El propio presidente Ximo Puig ha manifestado en varias ocasiones su posición y ha anunciado que si se aprueba la Generalitat recurrirá judicialmente.
Aún así los agricultores han pedido al Consell una mayor implicación. Desde Asaja-Alicante han calificado la posición de Puig como ambigua. Como consecuencia, los dirigentes socialistas han estado estos días recorriendo la Vega Baja para mostrar su oposición a los recortes y participarán en la manifestación de mañana. El presidente Puig no acudirá a la concentración porque no asiste a esta tipo de actos salvo los institucionales pero habrá una nutrida representación del Consell, han confirmado fuentes de la Generalitat. De esta forma, quien si estará es la consellera de Emergencia Climática, Mireia Mollà.
Por su parte, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha insistido en su posición y ha señalado que hay pocas posibilidades de reducir el recorte al trasvase. El ejecutivo castellano-manchego ha mostrado su respeto a la manifestación y ha añadido que, una vez aprobado el Plan de Cuenca del Tajo en el Consejo del Agua de la Confederación Hidrográfica del Tajo, «el margen de maniobra es poco» y que «nadie entendería» que hubiera cambios en lo acordado por una «amplísima mayoría».
Por otro lado, los regantes han aprovechado para convertir la protesta en una reivindicación del sector primario. De esta forma, en la concentración habrá una veintena de tractores y remolques con fruta para regalar y tirar por el suelo en protesta por la venta a pérdidas «a la que están condenados nuestros productores por cada día que no se pone en marcha la Ley de Cadena Alimentaria».
Los agricultores reclamarán «un plan de choque, con apoyos directos y medidas fiscales para hacer frente a las continuas escaladas en los costes de producción y en los principales inputs agrarios».
Otra de sus reivindicaciones es la «activación definitiva de la conducción de agua y derivación prioritaria de excedentes del Júcar hacia los regadíos del Alto y Medio Vinalopó a través del trasvase Júcar-Vinalopó».
También pedirán que los precios del agua desalinizada no supere los 0,3 euros el metro cúbico para los regadíos del río Segura. Además, exigirán que se aplique el principio de reciprocidad fitosanitaria, medioambiental y laboral en los acuerdos con terceros países.
Los convocantes también ponen sobre la mesa la necesidad de que haya una reforma de los seguros agrarios. Reclaman, por otra parte, una reducción del coste energético en las explotaciones agrarias y soluciones para los afectados por la Xylella Fastidiosa en Alicante.
Por otro lado, piden soluciones a la sobrepoblación de animales salvajes como el conejo o los jabalíes, compensación a los sectores ganaderos por los incrementos de costes derivados de las mayores exigencias ambientales y en bienestar animal y refuerzo de la vigilancia del medio rural ante el incremento de robos, entre otras reivindicaciones.
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