El retraso de Moderna amenaza con demorar la inmunización de sanitarios

La farmacéutica Moderna comunicó el lunes que iba a reducir prácticamente a la mitad el envío previsto de casi 384.000 vacunas para esta semana, lo que amenaza con demorar la inmunización del personal sanitario mayor de 55 años de la Comunitat que sigue pendiente de recibir, al menos, una de las dos dosis. La Conselleria de Sanidad ha previsto que los viales de Pfizer se destinen mayoritariamente a los colectivos de personas de mayor edad mientras que las de Moderna y AstraZeneca sean, principalmente, para personal sanitario. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad no es partidario de administrar la de AstraZeneca a los mayores de 55 años, por lo que a partir de esa edad, y sobre todo al personal del ámbito privado, la apuesta era administrar las vacunas de Moderna. Pese a ello, desde Sanidad aseguraron el lunes que hay reservadas 15.000 dosis para profesionales de la sanidad pública y privada pendientes de inmunizar total o parcialmente.

El Ministerio de Sanidad, en plena nueva crisis de suministro de vacunas por el anuncio de Moderna, ha decidido apostarlo casi todo al consorcio Pfizer/BionTech para conseguir su objetivo de lograr la inmunidad de rebaño a finales de verano con un 70% de la población vacunada. El Consejo de Ministros aprobó ayer dar luz verde a la compra de otros 20,8 millones de dosis adicionales de la vacuna fabricada por Pfizer.

Por otra parte, Sanidad anunció que esta semana vacunará a más de 25.000 mayores de 90 años y grandes dependientes no institucionalizados en los centros de salud o, si no pudieran desplazarse, en sus domicilios, medida que no acaba de convencer a los profesionales. Desde el Sindicato de Enfermería Satse indicaron ayer a LAS PROVINCIAS que los consultorios no son los lugares adecuados para inmunizar a esta población de riesgo. «Allí coinciden los diagnósticos de Covid y las pruebas PCR, por lo que es muy difícil establecer vías alternativas para garantizar la seguridad de estos pacientes», indicaron, para proponer la puesta en marcha de «espacios seguros» donde vacunar a esta población de riesgo. Desde Satse apuestan por emplazamientos amplios y si es posible al aire libre donde, incluso, se pueda acceder con vehículos particulares. «Se debe hacer sin que afecte a la actividad de los centros de salud y puedan seguir con la desescalada», agregaron desde la formación.

Por otra parte, el Colegio de Podólogos de la Comunitat anunció ayer que llevará ante la Justicia a la Conselleria de Sanidad «por considerar que los podólogos no son profesionales sanitarios, cuando sí lo son, y dejarlos fuera del plan de vacunación frente al Covid-19». La institución va a solicitar medidas cautelares al Tribunal Superior de Justicia.

Desde el colegio explican que la conselleria «nos han dejado completamente al margen alegando que no está descrita en el grupo 3B del ministerio la palabra podología cuando, textualmente, pone sanitarios y otros profesionales sanitarios. Esto es un error de interpretación y una barbaridad«, lamentó ayer Pilar Nieto, presidenta de la institución colegial.