De ruta para conocer la industria de la nieve

La distribución de los depósitos de nieve solía responder a factores físicos como la altitud y la orientación, ambos directamente relacionados con una climatología favorable. También era importante la proximidad respecto a los centros de consumo, así como un buen sistema de comunicaciones, algo que favoreció la construcción de neveras en la Serrella. La nieve de esta montaña no sólo abasteció a los municipios y ciudad de Alicante, sino que también era transportada a zonas de La Costera y La Ribera, e incluso en algunos años hasta lugares de Murcia.

El consumo de nieve se popularizó en España a partir del siglo XVI. A la costumbre de beber frío y de mantener frescos los alimentos se le sumaron sus propiedades medicinales. Todo ello exigió una compleja organización comercial durante más de cuatro siglos, que contemplaba desde la recogida y almacenaje de la nieve, hasta su transporte y distribución.

La nevera más icónica de Fageca es la que se encuentra a los pies de la cima del Pla de la Casa, cuyo amplio diámetro y profundidad capturan la atención del senderista. Por su parte, la cava de Famorca se encuentra en las inmediaciones del pico de la Mallà del Llop, otra de las representativas cumbres de la Serrella.