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La Inteligencia Artificial (IA) empieza a llegar a los centros de salud valencianos. Sanidad va poner en práctica una experiencia piloto, que consiste en colocar ... a la entrada de los ambulatorios una máquina, denominada asistente virtual, que servirá para que oriente a los pacientes a dónde dirigirse según su necesidad. De esta manera se pretende desburocratizar la Atención Primaria y aprovechar mejor los recursos, ya que cada persona irá a que lo vea el profesional más adecuado para cada caso.
Se trata de una prueba que se llevará a cabo esta semana en algunos centros de salud. Esta máquina podrá mantener una conversación con el usuario, igual que ocurre con la IA en los teléfonos móviles, para preguntarle por el motivo de su entrada al ambulatorio, y partir de las respuestas que se generen, el algoritmo creado por la IA podrá dirigir al paciente a un lugar u otro del centro, dependiendo de lo que necesite.
Le indicará si la mejor opción es que lo vea un médico, una matrona, una enfermera o un administrativo, el profesional que vaya a ser más eficaz para solucionarle el problema. Esta iniciativa la ha puesto a prueba con esta experiencia piloto el secretario autonómico de Planificación, Información y Transformación Digital de la Conselleria de Sanidad, Bernardo Valdivieso, con su equipo de trabajo.
Se trata de un primer paso, una prueba para poner en práctica la idea que hace desde hace unos meses se expresó desde Sanidad, que es la de incorporar en Primaria un triaje, como hacen en los hospitales, para conducir al paciente hacia la opción más rápida y eficaz. Desde la conselleria se habló de la posibilidad de poner a una enfermera para esa función, aunque ahora se va a probar con este asistente virtual.
La directora general de Atención Primaria, Eva Suárez, se está reuniendo en estos últimos días con los jefes de varias zonas básicas de salud para informarles de esta iniciativa y de cómo funciona para ayudar a los pacientes. Por el momento la prueba va a ser en unos pocos centros para ver cómo reciben la iniciativa los ciudadanos. En el departamento de salud de La Fe se va a colocar en tres centros de salud, pero habrá más departamentos donde se instale de forma provisional este asistente.
Hasta ahora todos los pacientes que van a Primaria tienen que ser vistos por el médico de familia en la consulta, ya sea porque están enfermos o porque necesitan un parte de baja, una ampliación de la medicación o decenas de casos de lo más variado. Para muchos de ellos, los enfermeros o los administrativos están capacitados para resolverlos, si se trata de quitar puntos de sutura, hacer una cura o cumplimentar un formulario o un parte. Por tanto, los profesionales de Primaria defienden que si se reparte el trabajo de manera acorde a la formación de cada trabajador, se lograría desatascar mucho las consultas y se reducirían las esperas de los pacientes.
El conseller, Marciano Gómez, ha manifestado en numerosas ocasiones su intención de introducir las nuevas tecnologías en la sanidad valenciana para mejorar el servicio y la atención a los pacientes y en esa línea se enmarca este proyecto piloto que se lleva a cabo esta semana en Primaria. No obstante, parece complicado que las personas de mayor edad, que suponen un gran porcentaje de los usuarios habituales de los centros de salud, puedan sentirse cómodos siendo atendidas por un asistente virtual de este tipo. Pero sí podrán hacerlo otras más jóvenes y más acostumbradas a las nuevas tecnologías, y así se podrá reducir el número de gente en espera.
Desde hace un año tanto la IA como la robótica están en los quirófanos de los hospitales valencianos de referencia, lo que permite realizar intervenciones de mayor precisión y con una recuperación mucho más sencilla y poco molesta para el paciente. Pero mientras la tecnología acelera en los hospitales, los centros de salud apenas disponen de ella, algo que se está intentando cambiar, todavía poco a poco, con iniciativas de este tipo.
La excesiva burocratización que hay en Primaria, donde los pacientes deben hacer cola para ser atendidos primero en el mostrador por un administrativo, y después dirigirse a la sala de espera de su médico, crea largas esperas y un exceso diario de número de pacientes, por encima de los 35 recomendados para cada jornada. Eso provoca, a su vez, que para pedir cita previa, en muchos centros de salud no dan una hora disponible hasta los siguientes cinco, seis o incluso más días. Lo que conlleva que mucha gente opte por ir de urgencias o directamente al hospital, y los atasque con patologías que deberían ser atendidas en los centros de salud, que por tanto necesitan unos procesos más sencillos y eficaces para que todo el sistema de salud funcione más ágilmente.
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