Ribó sigue adelante con el experimento de la semana de cuatro días laborales

Ya es un hecho. Los lunes 10, 17, 24 de abril y 1 de mayo serán festivos en la ciudad de Valencia con el objetivo, según ha indicado el alcalde, Joan Ribó, de probar la jornada laboral de 32 horas en el Cap i Casal. Será una experiencia pionera en el mundo a nivel de ciudad, según ha indicado el primer edil.

La iniciativa ya fue planteada hace unos meses por el alcalde y encontró el rechazo tanto de las Fallas como de los comerciantes. Pero el Ayuntamiento sigue adelante. «No se trata de reducir la jornada, que es una cuestión que compete a los agentes sociales. Es una prueba, una experiencia, un ejercicio de innovación que beneficiará a la sociedad y a los trabajadores», ha resaltado el alcalde.

En este sentido, el presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro y Ensanche, Borja Ávila, "no contempla la jornada de cuatro días porque consideramos que no es viable". Ávila ha subrayado que se ha trasladado al Ayuntamiento su opinión de que el 22 de enero se tendría que haber trasladado al 23 de enero y no al 24 de abril. También han señalado que no es el momento adecuado para una jornada de cuatro días "ya que el comercio se encuentra en una fase de recuperación sin haber alcanzado los tiempos prepandemia".

"Es perjudicial tener cuatro lunes seguidos festivos, sobre todo en abril que es un mes muy comercialmente hablando ya que salimos de una semana de fallas que es prácticamente inhábil en términos comerciales", ha asegurado Ávila.

El primer edil ha enmarcado la iniciativa dentro de la Estrategia Urbana 2020 que ha recordado que fue aprobada con el voto favorable de una treintena de concejales. En este sentido, ha señalado que la jornada de 32 horas se inscribe en los objetivos de hacer una ciudad amable y saludable y generar tiempo de calidad para sus habitantes.

El problema es que la iniciativa se desvirtúa por el hecho de que los cuatro días son festivos. Se trata del lunes de Pascua (10 de abril), San Vicente Ferrer (17 de abril) y 1 de mayo (Día del Trabajo). A estos el Ayuntamiento ha añadido el 24 de abril, fecha a la que ha trasladado el festivo 22 de enero (San Vicente Mártir) que cayó en domingo.

De esta forma, el experimento no parece que se vaya a efectuar en condiciones reales porque todo en la ciudad estará cerrado al ser todos los días festivos. Además, supondrá, según los comerciantes, que el 24, al no ser festivo en otras localidades, propiciará que la gente abandone la ciudad para pasar el día.

Por otro lado, el alcalde ha planteado que se pretende generar un debate sobre el futuro laboral. Aunque ha insistido en que se trata de una cuestión que no compete al Ayuntamiento de Valencia. Ribó ha recalcado las posibles ventajas de la iniciativa como la reducción de emisiones por la caída en la movilidad urbana.

El primer edil ha indicado que el estudio que realizará el Ayuntamiento se trasladará al resto de administraciones, empresas, sindicatos y agentes sociales «porque eso mejora la calidad de vida de los ciudadanos». Ha añadido que la tendencia va en esa dirección y ha puesto ejemplos de otros países donde se está reduciendo la jornada laboral. Es el caso de Gran Bretaña o Alemania.

La finalidad de esta experiencia es conocer su repercusión en "aspectos ciudadanos" y no empresariales, financieros o de administración pública solo como se ha hecho en otros países.

El concejal de Innovación, Carlos Galiana, ha destacado que se va a convertir la ciudad en un laboratorio en el que se va a implicar a toda la sociedad.

Por su lado, Marta Chillarón, gerente de Las Naves, ha destacado que el análisis se centrará en tres aspectos: el de salud y bienestar, económicos y medioambientales. Chillarón ha resaltado que no se trata de una reducción de la jornada laboral porque el cómputo global anual siguen las mismas horas.

Ha comentado que los objetivos marcados son "aportar información respecto a los impactos" de esta "experiencia piloto", "conocer los cambios que se producen como consecuencia de la reducción de la jornada" a cuatro días por semana; y "establecer un marco de estudio y evaluación que pueda servir a otras ciudades

La técnica analista de evaluación de políticas públicas de este centro innovación municipal Empar Soriano se ha encargado de enumerar las características que tendrá el estudio. En cuanto al apartado de salud y bienestar se va a computar la influencia sobre los hábitos de vida de los ciudadanos. Así se quiere saber en qué emplea el tiempo libre extra. «Queremos ver si se dedica a actividades como el asociacionismo, en hacer deporte o lo aprovecha para leer más», ha explicado. Además, ha apuntado se estudiará si se gasta "más tiempo para relacionarse" con otras personas, la percepción de bienestar de la ciudadanía, si se reduce la sensación de estrés, si se descansa más y se tiene mejor calidad del sueño; y cómo evalúan los valencianos una medida de estas características".

Otro de los objetivos es el medioambiental. Se pretende contabilizar cómo varían las emisiones, cómo es la calidad del aire, cómo cambia el consumo de energía, especialmente en el caso de las empresas e instituciones, o cómo se comporta el tránsito, si se usan más los autobuses, el volumen de bicicletas, los accidentes de tráfico...

También, dentro de este segundo ámbito, se pretende contabilizar el uso del tiempo vinculado a la huerta y a cocinar productos de cercanía, que son más saludables y tienen menos envases.

El tercer aspecto es el económico donde se quiere saber cómo le ha ido al comercio. También se quiere ver el comportamiento del comercio, en qué invierte el dinero la gente esos días, si compra más, si va a más restaurantes o si se fomenta el turismo de interior.

Para ello se han diseñado encuestas que se pasarán a los ciudadanos y también se realizarán entrevistas a personas clave. El estudio se realizará en varias fases. La primera, durante abril y mayo, consistirá en la experiencia piloto.

A partir de mayo se realizarán las encuestas y entrevistas y en junio y julio se procederá a la redacción del estudio que esperan que esté concluido en julio.

En el estudio participarán también otros departamentos dependientes del Ayuntamiento como la Oficina de Estadística, el servicio vinculado a la Smart City o el Centro de Gestión de Tráfico, como han indicado Galiana y Soriano. Asimismo, se tendrán en cuenta los datos de museos, teatros, gimnasios y otros centros deportivos y de ocio. En la iniciativa colaborará Labora, el departamento de empleo dependiente de la Generalitat, para cruzar datos.

• Temas
• Calendario Laboral