El Síndic de Greuges urge al Ayuntamiento a resolver la acera imposible de San Vicente

La resolución del Defensor del Pueblo de la Comunitat, Ángel Luna González, resulta contundente y recomienda al Ayuntamiento que adopte, «en el menor plazo posible», las medidas necesarias para habilitar un itinerario peatonal «que pueda considerarse seguro, cómodo, autónomo y continuo» en el tramo de la calle en cuestión.

El Síndic de Greuges ha notificado al Consistorio tal resolución para que exprese su posicionamiento en el plazo de un mes. Además, pide al Ayuntamiento que, en caso de negarse a su cumplimiento, presente una justificación y concrete el período que necesita para abordar el problema.

El Defensor del Pueblo se aferra a los artículos 5 y 39 de la Orden Ministerial TMA/851/2021 para instar al Ayuntamiento a estudiar las posibles actuaciones «a corto plazo». La norma indica que, para que una acera pueda considerarse accesible, debe contar con una anchura libre de paso «no inferior a 1,80 metros que garantice el giro, cruce y cambio de dirección de las personas».

Este embudo, muy cerca del cruce con la avenida de Giorgeta, afecta al tramo comprendido entre las calles Pianista Amparo Iturbi y Almudaina. La acera que se ven obligados a tomar los peatones tiene una estrechez que dificulta el tránsito. Y la de enfrente, visiblemente más amplia, está cortada desde 2021 debido a las obras de urbanización del antiguo Cuartel de Ingenieros. En estos terrenos, propiedad de Sepes (Entidad Pública Empresaria de Suelo), deben construirse varios bloques que sumarán 450 viviendas de protección pública y de alquiler asequible y un colegio público, el Santo Ángel de la Guarda. Una actuación que abarca 49.857 metros cuadrados y que incluye dos jardines. Los trabajos se iniciaron el 23 de junio de 2021 con un plazo de ejecución de 16 meses, pero se han producido diversas paralizaciones.

De esta forma, la multitud de viandantes que circulan por este punto de San Vicente se concentran en una acera de sólo 90 centímetros de anchura. Circunstancia incómoda, sobre todo con el paso de carros o sillas de ruedas. En ocasiones, los peatones optan por bajar a la calzada en busca de un camino más despejado, con los riesgos que ello conlleva.

La asociación de vecinos Parque Central-Iturbi reclaman soluciones, aunque no ha encontrado ninguna respuesta convincente por parte del Ayuntamiento durante los últimos años. La semana pasada, el presidente de la plataforma, Juan Julián Vergés, se reunió con el concejal Carlos Mundina y se dirigió por carta a la alcaldesa de Valencia, María José Catalá.

Los residentes del barrio de la Raiosa exigen el retranqueo de la acera, como ya ocurrió hace cuatro años a la altura del número 231 de la calle San Vicente Mártir. Para llevarlo a cabo en las proximidades del 249, resultaría necesario el derribo de una casa abandonada cuyos propietarios solicitaron la declaración de ruina en junio de 2020. El Ayuntamiento declinó tal opción e indicó a los dueños del inmueble que podían pedir la licencia de demolición sin una declaración de ruina legal.

En cualquier caso, la demolición de esta casa no implicaría por sí sola el retranqueo de la citada propiedad y la ampliación de la polémica acera. Para ello, tal y como apunta el Síndic, habría que poner en marcha «los mecanismos de equidistribución previstos en la legislación urbanística».

Durante la anterior legislatura, el Consistorio ha supeditado las diferentes actuaciones a la ejecución del Plan de Actuación Integrada del Parque Central. El pasado 21 de febrero, a través de una carta, la entonces vicealcaldesa, Sandra Gómez, respondió a los vecinos indicando que esta situación «se encuentra pendiente de la ejecución de la urbanización del ámbito del PAI».

El presidente de la asociación de vecinos Parque Central-Iturbi, Juan Julián Vergés, se muestra rotundo: «En mi opinión, la documentada resolución del Síndic de Greuges es un inequívoco varapalo a la exvicealcaldesa y a Sepes y a lo poco o nada que importamos los vecinos a nuestra clase política dirigente. El ciudadano solo existe para pagar impuestos y depositar su voto. Esa es la lamentable conclusión«.