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MANUEL GARCÍA/ ADA DASI
L'ELIANA/Riba-Roja
Martes, 15 de noviembre 2022, 13:41
La consellera de Justicia, Gabriela Bravo, ha anunciado que la Generalitat pedirá al Gobierno central la declaración de zona catastrófica para los municipios afectados por las lluvias del pasado fin de semana.
Bravo, quien se ha reunido telemáticamente con representantes de 45 municipios afectados, 19 de Valencia y 26 de Castellón, ha recordado que el Consell aprobará este viernes el decreto para impulsar las ayudas para los términos afectados.
Esta reunión con los alcaldes de los municipios afectados se produce después del episodio de lluvias ocurrido este fin de semana y que ha afectado principalmente a las comarcas de l'Horta y el Camp de Túria y a municipios de la provincia de Castellón.
“La Generalitat ya está ejecutando las actuaciones de urgencia para restablecer los desperfectos en infraestructuras y bienes públicos, cuya reparación inmediata es necesaria para recuperar la normalidad”, ha indicado la consellera, quien ha añadido que los municipios dispondrán de un plazo de 30 días tras la publicación del acuerdo para presentar las estimaciones de daños.
Gabriela Bravo ha subrayado que la Generalitat “va a trabajar con la máxima coordinación entre departamentos para que las líneas de subvenciones lleguen los antes posible y que los municipios puedan retomar su día a día”.
Por otra parte, la responsable de Interior ha puesto en valor el trabajo de las distintas agencias que han participado en la emergencia y la implicación de los equipos que han desempeñado su labor para salvaguardar la seguridad de las personas.
Al respecto ha detallado que durante el episodio de lluvias se han realizado más de 200 actuaciones de los distintos servicios de bomberos, las más destacadas están relacionadas con achiques, caída de cascotes, coches parados en las vías, árboles caídos y retirada de contenedores o saneado de fachadas.
En concreto, según el último balance de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, desde el día 10 hasta el 13 de noviembre, las llamadas atendidas por el 112 en relación con el temporal han sido 3.081, que se han traducido en un total de 2.136 incidentes.
La consellera de Interior ha defendido que “las actuaciones de la Generalitat no terminan con la respuesta inmediata a la emergencia. También lo hacemos en la reconstrucción y con ayudas a los planes de emergencia”, ha indicado Bravo, quien ha agregado que como administración pública “continuaremos vigilantes para mantener todas las medidas de anticipación que estén a nuestro alcance para mitigar los efectos de la emergencia climática que nos atenaza cada vez con más frecuencia”.
Por su parte, la delegada del Gobierno en la Comunitat, Pilar Bernabé, ha visitado esta mañana las zonas más afectadas por la DANA en Riba-roja, acompañada por el alcalde Robert Raga. Bernabé ha manifestado la intención de agilizar los trámites para declarar la zona catastrófica y que los afectados puedan acceder a ayudas, y ha trasladado "el compromiso del Gobierno para dar una pronta respuesta para la reparación de los daños".
También ha señalado que desde Protección Civil "se estará a disposición de los consistorios para informar de las subvenciones existentes y de cómo solicitarlas". En estos momentos según ha recordado la delegada, "existen subvenciones del Ministerio del Interior a la que los municipios, personas físicas y jurídicas ya pueden acogerse".
Respecto a la declaración de zona catastrófica, Bernabé ha explicado que se ha comunicado a los 25 municipios afectados de las comarcas de l'Horta Sud y Camp de Túria que tienen hasta el día 23 de noviembre para remitir la documentación de los daños que se pasará al Ministerio del Interior. “Todos ellos estaban en Emergencia 1 por lo que no habrá problemas para declarar la zona catastrófica”, ha remarcado Bernabé.
De igual forma ha hecho referencia al proyecto de la Confederación Hidrográfica del Júcar que afecta también a los términos de Aldaia y Quart y ha señalado que se está a la espera de los informes de la dirección general de Paisaje de la Conselleria para acometerlo. “La intención es que salga adelante lo más pronto posible”.
Por su parte, el alcalde, Robert Raga, ha apuntado que hay 36 caminos que han sufrido daños, así como el polígono industrial donde empresas de envergadura, entre ellas el parque logístico de Valencia que tuvieron que parar durante cuatro horas. “Esperamos no tener trabas para el proyecto que permitirá desaguar por la V-30”, ha apuntado. Raga ha recordado que el municipio se quedó prácticamente aislado con el corte de tres carreteras principales.
La visita se ha centrado en las calles Velázquez y Barranc dels Moros donde se formó un río y en el Camí de la Poza, donde se ha destruido el vial y varios campos en producción.
En la zona rural, se han entrevistado con José Carlos Llorca, un agricultor que ha perdido toda su producción de plantas. Las 20.000 macetas que tenía en invernaderos se las llevó la fuerza del agua, "han acabado en el barranco o incluso en el río", solo unas cuantas permanecían en el terreno totalmente arrasado. La desolación del agricultor ante la estampa era máxima, con el vallado por el suelo y las lonas. "Probablemente lo deje", afirmaba.
En esta misma zona, la fuerza del agua ha arrancado la tubería que iba soterrada por el Camí de la Poza y que estaban reparando operarios del Ayuntamiento.
La situación en la calle del Barranc dels Moros también era de desolación. Esta mañana, una grúa seguía sacando la decena de coches atrapados en uno de los garajes de una finca donde el nivel llegó a alcanzar el metro y medio. Este vial es uno de los que sufrió el desbordamiento del barranco, a causa de la rueda de un camión y varios árboles que taparon la canalización, cuyas imágenes fueron circulando por las redes.
"Sabemos que vivimos en una zona de barranco pero no esperábamos que pasara algo así", comenta Bárbara, una vecina, aunque en una de las paredes se puede ver la marca de otra inundación que ya sufrió el garaje comunitario. "Estaba en el balcón del primer piso y casi podía tocar el agua con la mano, hemos pasado mucho miedo", recuerda, la joven
Los 45 pueblos que inicialmente se ha visto afectados son: Benaguasil, Bétera, Gàtova, l'Eliana, Llíria, Loriguilla, Marines, Olocau, Pobla de Vallbona, Riba-roja del Túria, Vilamarxant, Alaquàs, Albal, Aldaia, Alfafar, Manises, Quart de Poblet, Torrent y Xirivella, en la provincia de Valencia.
En Castellón: Almassora, Almenara, Alquerías del Niño perdido, Benassal, Benicarló, Benlloch, Burriana, Càlig, Canet Lo Roig, Castell de Cabres, Castelló de la Plana, Xert, Xilxes, Culla, Espadilla, Moncofa, Nules, La Pobla de Benifassà, Rosell, Sant Jordi, Sant Mateu, Traiguera, Vallibona, Vila-Real, Vilavella y Vinarós.
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