LOLA SORIANO
Miércoles, 22 de abril 2020, 10:17
El rojo no lucirá este verano en los pañuelos de los mozos que participan en los Sanfermines ni tampoco en las calles de Buñol, puesto que ambas fiestas de renombre internacional las han suspendido. Primero ha sido Pamplona la que ha tomado la decisión y ayer se sumaba el consistorio de la Hoya de Buñol.
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Así pues, en agosto no se podrá realizar la batalla de tomates que tiñe de rojo Buñol y habrá que esperar a 2021 para participar o ser testigo de esta batalla campal. La propuesta de la suspensión la puso sobre la mesa la teniente de alcalde y concejal de Turismo-Tomatina, María Valles, y logró el apoyo del gobierno local. Ayer por la mañana se trasladó al resto de portavoces y se ratificará en el pleno del día 27.
La alcaldesa de Bunyol, Juncal Carrascosa, aseguró ayer que «era una opción que veníamos barajando desde hace tiempo viendo conforme iba la evolución de la crisis». Afirmó que la decisión se ha tomado por muchas razones, «entre ellas por la logística. Necesitamos 140.000 kilos de tomates y había que hacer la licitación, que supone una inversión de 60.000 euros. Había que comenzar con las plantaciones y la gestión lleva mucho trabajo«.
Además, detalla que la Tomatina «es una fiesta donde hay mucho contacto físico, prácticamente de piel con piel y es difícil hacer otras cosa que no sea eso«.
La alcaldesa también indicó que hay un aforo de 22.000 personas «y en enero se puso ya en marcha la venta individual de entradas y ya estaban a la venta para grupos de touroperadores, pero hasta la fecha está todo paralizado«. Incluso añadió que «no tenemos seguridad de que en esas fechas se pudieran recuperar los vuelos internacionales y no hay que olvidar que a esta fiesta vienen visitantes de todas las partes del mundo«.
Explicó que «no se le escapa a nadie lo difícil que sería organizar nuestra fiesta más internacional en esta situación donde no se podría garantizar las condiciones óptimas de control sanitario para los participantes«.
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En opinión de Carrascosa «lo mejor ante la incertidumbre y en vista de que la pandemia no pasa tan rápido como creíamos, hemos pensado que lo mejor era centrar los esfuerzos en trasladar los festejos a 2021«.
Carrascosa detalló que precisamente este año habían promocionado la fiesta en Fitur y durante Fallas porque la Tomatina cumple 75 años, «pero vamos a centrar nuestros esfuerzos en el 75+1, porque haremos los actos conmemorativos el año que viene«. La concejal de Turismo Maria Valles añadió que «extender el 75 aniversario a 2021 no supone un aplazamiento sino una ampliación, ya que se ofrecerán más contenidos y más hitos que engrandezcan la Tomatina«.
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De igual modo, se insistió en que preservarán la imagen de esta fiesta única en todo el mundo y que todas las decisiones «se han hecho pensando en el bien común y con la seguridad de que recobraremos la Tomatina». Cabe recordar que la última vez que se canceló este evento que ya tiene reconocimiento mundial fue en 1957 por decisiones políticas.
El Ayuntamiento de L'Eliana anunció ayer la cancelación de sus Fiestas Mayores, inicialmente programadas del primer fin de semana de julio al día 17. La administración local deja la puerta abierta a celebrar actos «simbólicos» en las jornadas grandes (del 15 al 17), decisión que se tomará a final de junio según evolucione la pandemia. Los clavarios y organizadores repetirán cargos en 2021.
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