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R. V.
Domingo, 25 de julio 2021, 23:51
Tres incendios forestales en la provincia de Valencia obligaron ayer a emplearse a fondo a los servicios de emergencias para controlarlos.
El primero se localizó en Losa del Obispo que obligó a la movilización de un avión, tres unidades de bomberos forestales y dos autobombas.
Efectivos terrestres y aéreos se movilizaron a primera hora de la tarde de ayer para intervenir en un incendio declarado en el paraje de la Font Tarda, en Simat de la Valldigna. Hasta allí se desplazaron cinco medios aéreos de la Generalitat, dos aviones y tres helicópteros, uno de ellos con unidad helitransportada de bomberos forestales-.
Más tarde se declaró otro siniestro en el Barranc Matilde de Rafelguaraf. Emergencias envió a la zona un avión y helicóptero además de una unidad terrestre y una autobomba.
Por otro lado, al menos tres incendios forestales causaron daños en unas 5.000 hectáreas de Tarragona, Albacete y Huelva. Uno de ellos calcinó desde el sábado por la tarde unas 1.500 hectáreas en Santa Coloma de Queralt (Tarragona).
En Liétor (Albacete), el desastre afectó a unas 2.500 hectáreas y a algunas zonas de cultivo, si bien se pudo contener. La Junta de Castilla-La Mancha tuvo que decretar el confinamiento de las pedanías de Mingogil e Isso.
Un incendio en Villarrasa (Huelva) se llevó por delante 600 hectáreas de superficie arbolada, lo que impulsó a movilizar en el lugar a más de 250 efectivos.
En La Taha, Granada, el fuego se adentró en Pitres-Capilerilla. Se enviaron a la zona 82 bomberos y seis aeronaves. También se logró estabilizar el incendio en un paraje de Yunquera (Málaga).
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