El Tribunal de Cuentas exige 1,2 millones a exdirectivos de la EMT

valencia. El Tribunal de Cuentas ha vuelto a exigir a trabajadores de la EMT que depositen una fianza económica, en este caso 1,2 millones de euros, tras la investigación abierta por la propia empresa respecto a las jubilaciones parciales, que se pagaron de forma irregular, según denunció la EMT en 2018, entre 2014 y ese año. En este caso, los señalados son Andrés Bernabé, exgerente y exdirector de recursos humanos de la entidad, al que le piden 254.000 euros; Carlos Romero, exdirector de recursos humanos, del que solicitan 881.000 euros; y María Rayón, exdirectora de Gestión, que tendrá que depositar 68.000.

Los hechos se remontan a 2001, bajo gobierno del PP, cuando comenzó el pago de jornadas no realizadas, según denunció el presidente de la EMT, Giuseppe Grezzi, en 2017. De las 132 que se abonaban para casos de jubilaciones parciales, el trabajador sólo hacía 65. La cuestión se aprobó en un convenio colectivo y la Seguridad Social dio su visto bueno Pero el caso llegó a la Agencia Valenciana Antifraude, que lo derivó al Tribunal de Cuentas, que acaba de emitir una liquidación provisional. En ella, como se consideran prescritos los hechos anteriores a 2014, sólo se enjuician los ocurridos entre ese año y 2018. Según informó Radio Valencia, los señalados son tres trabajadores de la entidad, que ya no son directivos pero siguen en Correo Viejo, según ha podido saber este diario. LAS PROVINCIAS pidió la liquidación a la entidad, que se negó a facilitarla con el argumento de que aún no la tenían los consejeros.

Llama la atención que el Tribunal de Cuentas sí señale al exgerente de la empresa, que lo fue hasta 2015, el mismo Bernabé, y no a José Enric Garcia Alemany, que ocupó el mismo cargo desde ese año hasta 2020 y bajo cuya dirección se siguieron pagando estas jubilaciones parciales de forma presuntamente ilegal durante dos años. Además, aparece el nombre de Rayón, de quien las conclusiones de la comisión de investigación del fraude de septiembre de 2019 recomendaban su cese. Grezzi se limitó a degradarla y dejarla sin responsabilidades, pero siempre ha gozado de su confianza en temas contables de la entidad.