El TSJCV obliga a garantizar un 25% de horas en castellano a una clase tras el recurso de una familia

La decisión se ha conocido este lunes a través de la asociación Hablamos Español, que está ayudando a los padres con el proceso judicial. Según el auto, la Conselleria de Educación debe tomar «las medidas necesarias para que mientras se tramita el presente recurso la hija del actor, juntamente con sus compañeros, reciba una enseñanza bilingüe, esto es, en la que el castellano sea utilizado como lengua vehicular al menos en el 25% del horario lectivo».

La demanda presentada cuestiona que el proyecto lingüístico (PLC) que se autorizó al centro, el Ceip Guillem d'Entença, cumpla con los criterios establecidos en la norma botánica: que al menos el 25% del horario lectivo durante toda la Primaria sea en la lengua oficial que no es la mayoritaria (en este lo es el valenciano) y que entre las materias elegidas haya al menos una troncal o análoga distinta a la de Castellano propiamente dicha. Según la Guía de Centros Docentes de la Generalitat, y también la información aportada al juzgado por la Abogacía de la Generalitat, se vehicula en castellano justo el 25%, idea que no comparten los denunciantes tras analizar el proyecto lingüístico, que incluye entre las materias en español la Religión o Atención Educativa, el tiempo de tutoría y una hora semanal de proyectos.

La sección cuarta de la sala de lo contencioso administrativo del TSJCV no entra en el fondo de la cuestión, es decir, el análisis del proyecto y su adaptación o no a la ley o a la jurisprudencia (en 2022 se determinó que debería existir una proporción razonable entre lenguas oficiales atendiendo al contexto del centro), pero considera que sí se cumplen las condiciones que permiten adoptar una medida cautelar, como paralizar efectos que pueden prolongarse hasta que se resuelva el recurso.

Además, como la ley botánica exige que para evitar la «segregación» entre alumnos todos tendrán el mismo proyecto lingüístico, es decir, un idéntico peso de las lenguas oficiales y el inglés en grupos del mismo curso aunque sean diferentes líneas, se determina que «la enseñanza bilingüe se aplicará a la hija del actor y a sus compañeros del mismo curso», que es uno de los últimos de Primaria.

«Esta familia valenciana no sólo va a ver reconocido su derecho a tener una asignatura troncal en español, sino que el tribunal nos ha concedido la aplicación de las medidas cautelares, de manera que habrá de aplicarse inmediatamente para esta niña y para toda su clase», tal y como defiende Hablamos Español a través de un comunicado.

«Es el primer caso del 25% que se judicializa en la Comunitat, y cabe destacar que la conselleria no quería de ninguna manera aplicarlo en este colegio, bajo el argumento de que sí se cumplía ese mínimo de presencia del español y que, en todo caso, era imposible de aplicar con el curso ya iniciado», se añade. Aunque hasta ahora ha habido pronunciamientos sobre PLC aprobados al amparo de la ley del Botánico, los que acabaron con una sentencia favorable sirvieron para fijar el posicionamiento del tribunal (el citado equilibrio) y para cambiar los pesos autorizados previamente, sin que en ningún caso haya trascendido una medida cautelar que persiga garantizar el mínimo legal.

Además, la organización ha arremetido con contundencia contra el departamento de José Antonio Rovira. «La conselleria estaba ninguneando este procedimiento, a esta familia, y a Hablamos Español», alega la organización, «hasta el punto de que utilizó el silencio administrativo para entorpecerlo».

En este sentido, la presidenta Gloria Lago defiende que durante una reunión celebrada en noviembre le solicitó al director general de Ordenación y Política Lingüística «que arreglara el caso de esta familia para no llegar a los tribunales», aunque su respuesta fue que «en ese colegio se cumplía el 25% porque lo había dicho su predecesora», aludiendo a la resolución oficial que autorizó el PLC, que sí decía que se alcanzaba el citado porcentaje, algo que los demandantes cuestionan tras analizar la distribución horaria. «Le dije que lo mirara, pues lo habíamos aportado con la demanda, pero no me hizo caso», añade Lago, que también critica que se le trasladara que cuando se produjo el encuentro ya no se podía «cambiar nada». Esto es, con el curso ya avanzado.

«Ahora el TSJCV nos da la razón y obliga a la conselleria a implantarlo ya. ¿Quién compensa a esa familia y a todas las demás por el tiempo perdido?», se pregunta la presidenta. «Lo que tienen que hacer es aprobar de una vez una ley que garantice que se pueda elegir la lengua vehicular de las asignaturas troncales. Es la única forma de arreglar esto de manera duradera», concluye. «Además, nos pone en bandeja jurisprudencia que será muy útil de cara a futuros procedimientos, y a los que tenemos en diferentes fases judiciales en otras comunidades autónomas», sentencia.

Por su parte, fuentes de la Conselleria de Educación explican que todavía no se les ha comunicado oficialmente la medida, aunque una vez llegue la notificación «dará parte a la inspección educativa para que compruebe el cumplimiento» del proyecto lingüístico, antes de insistir en que ya recoge un 25% de horas en castellano, como defendió la Abogacía.

Además, recuerda que esta situación se desprende de la etapa de gobierno anterior y que se han podido detectar otros incumplimientos del mínimo (en referencia los proyectos experimentales de Infantil). También destacan que «garantizar los derechos lingüísticos del alumnado» es uno de los «pilares» del Consell, así como «mantener el equilibrio entre las dos lenguas cooficiales y el derecho de los padres a elegir la lengua base», en referencia a la proposición de ley por la que se regula la libertad educativa.