El proyecto Determinantes de Atención Temprana (DAP 360º) contribuirá a facilitar la detección de casos de desprotección entre niños y adolescentes, como ser objeto de cualquier tipo de maltrato, a través de un programa informático diseñado para ser utilizado por los profesionales que trabajan en el sistema de protección de menores. Tal y como ha explicado el investigador principal, José Javier Navarro, la idea es que la fase de comercialización se inicie en septiembre una vez cerrados los últimos ajustes relacionados con la confidencialidad de los datos a tratar.
Publicidad
El Jardín Botánico de la Universitat de València ha acogido este miércoles la presentación de la nueva herramienta, que se compone de 97 indicadores que ayudan a los especialistas a valorar el riesgo de cara a elaborar un diagnóstico y decidir las medidas a adoptar. Durante la jornada se ha insistido en varias ocasiones en la idea de que es un medio de apoyo al profesional, de cuyo juicio dependerán las decisiones finales que se tomen en relación a los casos en los que intervenga.
Los usuarios, especialmente técnicos de servicios sociales, tienen varias opciones para contestar en cada uno de los ítems: si no hay información sobre determinada situación, si existen evidencias de que no se da, si hay indicios de que sí sucede pero no se puede confirmar o si se tiene la constancia de que se produce. En base a la información que se introduce en cada indicador, cuyo peso está ponderado (algunos son más importantes que otros) se obtiene un resultado con un código semafórico, por ejemplo si el riesgo es leve (verde), moderado (amarillo) o alto (rojo).
Las variables tienen que ver con la familia, como si existen antecedentes de desprotección, episodios de violencia o negligencias, con el entorno del menor (condición de migrante, cuestiones económicas, sanitarias o educativas) y con características de protección, lo que supone una de las novedades de la aplicación. Es decir, el algoritmo también valora condicionantes que resulten positivos de cara a la definición del resultado, como si hay recursos de autocuidado, los padres tienen habilidades para resolver conflictos o existe familia extensa. Navarro ha recurrido a un ejemplo gráfico para explicar este apartado: «Podemos tener un niño tutelado por la situación que se vive en su casa, pero dispone de unos abuelos con los que el clima es fantástico, algo que se debe aprovechar».
Noticia Relacionada
La herramienta también puede ser utilizada por profesionales de diferentes disciplinas y servicios, como el sanitario o el educativo, en función de la decisión que tome el administrador del programa. Puede ser adquirido por ayuntamientos, mancomunidades e incluso por la Generalitat, sin olvidar organismos de otras comunidades o del extranjero.
Publicidad
De hecho, el proyecto nació por encargo de la Dirección General de Infancia de la Conselleria de Políticas Inclusivas, si bien dejó de implicarse pasados unos meses. Esta cuestión ha sido abordada durante la jornada, especialmente en el turno de preguntas. En cualquier caso los investigadores no cierran la puerta a recuperar vías de cooperación con la administración autonómica, que no ha participado en la presentación. Sí han estado representadas entidades municipales, mancomunidades, colegios profesionales y organizaciones asistenciales como Cruz Roja.
El proyecto nació en 2019 y el diseño de los indicadores se ha basado en las aportaciones de cerca de 300 profesionales que trabajan en el sistema de protección. Los resultados que arroja tienen una validación científica, y la metodología empleada se ha publicado en revistas de alto impacto, sometida por tanto al juicio de pares. «Las revisiones de los artículos nos indican que lo que hemos hecho es correcto», ha ejemplarizado José Manuel Tomás, miembro del equipo y catedrático de Metodología de las Ciencias del Comportamiento.
Publicidad
Entre las ventajas que ha querido destacar Navarro está que arroja resultados objetivos y basados en un lenguaje común -«que un nivel de riesgo moderado lo sea en un barrio deprimido de una y otra población»-, la agilidad en la detección previa y la seguridad jurídica que da a los trabajadores de los servicios sociales de cara a tomar decisiones de intervención que tienen implicaciones legales. El programa estará disponible para diferentes dispositivos, ya sean ordenadores, móviles o tablets.
La rectora de la Universitat, Mavi Mestre, ha participado en la sesión inaugural, destacando que DAP 360º es un instrumento «imprescindible para una evaluación rigurosa que siempre queda supeditada al diagnóstico de los profesionales».
Publicidad
También ha defendido que da respuesta al mandato de la Ley de derechos y garantías de la infancia y la adolescencia de la Generalitat, que recoge la dotación para las entidades locales, competentes en materia de servicios sociales, de una herramienta basada en la unidad de criterio a la hora de valorar situaciones y realizar intervenciones. «Los autores de esta ley tienen la oportunidad de utilizarla», ha señalado, lo que se puede interpretar como un llamamiento a la administración autonómica para que la adopte, retomando la implicación inicial en el proyecto.
Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.