Contenedor prefabricado donde están vacunando en Picanya este lunes. Irene Marsilla

Vecinos de la zona cero tras vacunarse: «Hay que estar protegido de los virus después de todo lo que ha pasado»

Cinco municipios afectados por la DANA retoman este lunes la inmunización de gripe y Covid después de casi un mes sin hacerlo

José Molins

Valencia

Lunes, 25 de noviembre 2024, 18:49

La actividad en los centros de salud de los municipios afectados por la DANA cambió por completo el 29 de octubre. Durante casi un mes, los ambulatorios menos afectados han estado funcionando sólo para urgencias al principio y en los últimos días ya con algunos ... servicios más. Otros quedaron destrozados y pudieron reabrir esta semana pasada, pero con muchas limitaciones. La campaña de vacunación de gripe y Covid quedó paralizada el día de inundación y este lunes se ha empezado a retomar en algunas de estas zonas, ya sin cita previa para la población.

Publicidad

En el centro de salud de Picanya se ha vuelto este lunes a vacunar, y lo han hecho en un contenedor prefabricado que ha colocado Sanidad de manera provisional en la puerta, ya que la planta baja está en obras porque quedó destrozada en la inundación, debido a que se encuentra muy próximo, a escasos metros, del barranco del Poyo, zona cero de la tragedia. También han vuelto en Alaquàs, donde han habilitado el centro social Benager ante el mal estado del ambulatorio, y en Paiporta, en el centro de salud por la mañana y en el centro social Ratjolar por la tarde.

Además en Aldaia en el centro parroquial es donde se está vacunando desde este lunes, mientras que en Albal se está haciendo en el centro de salud. Para este martes van a retomar las inmunizaciones en Alfafar, Benetússer y Sedaví, en todos ellos en el ambulatorio, mientras que el miércoles será el turno de Massanassa y Catarroja, este último en la unidad móvil y en la tienda de campaña de SESCV.

En ese barracón prefabricado de Picanya hay espacio para el mostrador de administración y para una camilla, donde dos enfermeras vacunan a los pacientes. Uno de ellos es José Martínez, que tenía cita el 31 de octubre pero la riada se la canceló. «No sabía que hoy vacunaban, me lo han dicho, que era sin cita y me he puesto de las dos. Es una mínima vuelta a la normalidad, poco a poco, hay que estar protegido después de todo lo que ha pasado. Mi mujer va a venir a vacunarse estos días también», señala el hombre. «Es un contenedor prefabricado pero es lo que hay, porque aquí en la planta baja no se puede hacer nada, y al menos dan servicio. Con todo lo que hemos pasado, sólo nos faltaría que hubieran virus, hay que protegerse», destaca.

Publicidad

Dedicación específica

Una de las enfermeras que estaba vacunando es Raquel. «El personal del centro de salud nos vamos rotando para estar de forma específica para vacunar. Viene gente de todas las edades, y se ponen las dos vacunas. Va a tardar un tiempo en crear defensas pero es importante que se vacunen. Ahora hay mucha gente que está en otra cosa, sacando barro, pero es recomendable que hagan un paréntesis y que vengan. Tenemos toda la planta baja en obras y nos falta espacio, hemos repartido consultas en la primera planta», cuenta la profesional.

Y también ha aprovechado la mañana Mari Carmen, vecina de Picanya. «Me he vacunado todos los años, esta vez ha sido un poco raro pero antes la DANA no me dio tiempo y ahora, que venía a otra cosa, me han dicho que estaban vacunando y he aprovechado, porque no lo sabía. Aquí en Picanya ha habido desastres muy gordos y esta medida es un poco una vuelta a la normalidad, tenemos que hacerlo porque sino acabaremos tontos todos. La mayoría de gente de mi entorno se va a vacunar también o ya lo están», apunta la mujer.

Publicidad

Para los mayores e inmunodeprimidos está especialmente aconsejada la vacuna, como es el caso de Inocenta, que sufre arritmia, lo que se le complica con el polvo en suspensión que hay desde la riada. «Me asfixio mucho, así que me tengo que vacunar para no coger estos virus. Era necesario ir volviendo a lo habitual. El centro de salud está mal, igual que todo el pueblo. Yo tenía cita pero ya no pude venir porque pasó esto».

Antonio también se ha enterado por casualidad de las vacunas, pero prefiere esperar a que su médico se lo aconseje y pone en valor, pese a que sea en un barracón en plena calle, que se retome el servicio. «Aunque sea algo tan provisional es positivo que se pongan a vacunar, está siendo muy duro tantos días. Le diré a la gente de mi entorno que ya están vacunando por si quieren venir», expresa este vecino.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Empieza febrero de la mejor forma y suscríbete por menos de 5€

Publicidad