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LEA GUGELMANN
Valencia
Lunes, 18 de julio 2022, 01:04
Un viaje de seis días a Marruecos, con un programa en el que se combinan actividades como visitar una 'kasbah', montar en 4x4 camino de ... un oasis o hacer una ruta en camello por el desierto para ver la puesta de sol con talleres, cursos y mentoring para emprender a ser un empresario. Esa es la idea original de la Cátedra de Cultura Empresarial que ha seleccionado a 15 alumnos de la Universitat de València (UV) acompañados de cinco profesionales para vivir esta experiencia de aprender a emprender.
Para el creador de este primer Campus Experiencial Universitario, Juan Manuel Baixauli, la opción de ir a Marruecos se pensó para tener un «contraste cultural y un contraste empresarial». En este sentido ha elegido dos destinos poco turísticos: Agz y Erg Chegaga.
Durante la estancia, los alumnos han recibido el testigo de cinco empresarios consagrados así como la intervención de emprendedores marroquíes con el objetivo de entender las diferencias culturales que pueden surgir en el mundo empresarial. Nombres como Ángela Pérez (Health in Code y reciente Premio Jaume I), Juan Bueno (Myrentogo Mobility), Guzmán López (Explorando el Kilimanjaro) Juan Manuel Baixauli (Consultia Travel) o Miguel Ángel Juan (S2 Grupo), además de Asier Rojo (Arat Natura), Javier Ortizá (Quasar Dinamics), Giancarlo Matos de Almeida (Boook), Loreto Crespo (Genotipia, la economista Jennifer Carmona y la nutricionista Lorena Jericó.
Basándose en sus experiencias laborales, han proporcionan formaciones como '¿Quién puede ser un empresario?' o 'Yo quiero ser un empresario'.
El equipo forma parte de la Cátedra de Cultura Empresarial de la UV que se dedica a fomentar el espíritu empresarial de los universitarios y que ha organizado el viaje gracias a la financiación de varios emprendedores.
Además, la formación cuenta con 15 graduados de la UV seleccionados de diferentes disciplinas como ADE, derecho, negocios internacionales, ciencias gastronómicas, educación infantil o ingeniera química. Sobre la variedad de grados, el creador del campus ha resaltado que «es un error pensar que solo los alumnos de ADE y de derechos pueden ser emprendedores».
Para Sarah Soler, estudiante del grado de emprendimiento, el viaje ha sido una experiencia enriquecedora y humana que le ha permitido «conectar con personas» y «tener una perspectiva distinta de personas que ya han tomado el camino del emprendimiento». «Cada día ha sido enseñanza», resalta la participante de 25 años que explica cuál ha sido para ella su aprendizaje más importante: «Intentarlo y fallar cuanto antes».
Es solamente la primera edición del campus pero el creador tiene grandes aspiraciones para el proyecto y la esperanza de seguir con varias ediciones para así «consolidar el campus» y dar a los jóvenes la oportunidad de tener las herramientas de emprender. «Algo esencial para nuestra sociedad», según Manuel Baixauli, director también de Consultia Bussiness Travel. A su juicio, «si hay más empresarios, hay más riqueza, hay más bienestar y repercute positivamente».
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