Vivienda compra 29 pisos en La Pobla de Vallbona por 1,6 millones para evitar el desalojo de una veintena de familias

Hoy ha sido un día de celebración para las 21 familias de dos bloques de la calle Argila de La Pobla de Vallbona afectadas por un desahucio de un fondo de inversión. Lo que debería haber sido una jornada de desalojo, se ha transformado en aplausos con los que han recibido al conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalamau, y al alcalde del municipio, Josep Vicent García.

Martínez Dalmau ha comunicado a los afectados que la Conselleria ha comprado 29 de los pisos de este grupo por valor de 1,6 millones de euros «un precio muy justo», como ha señalado, a una media de 58.000 euros cada vivienda «por debajo del precio de mercado». Además a estas se han sumado tres más propiedad de la Sareb, con lo que el municipio pasa de cero a 32 pisos de vivienda pública y se convierte en el municipio de Camp de Turia con más oferta de este tipo. «Es un referente para la Comunitat», ha señalado.

«Esta es la política que estamos desarrollando, duplicar el parque público en la Comunitat para que las familias puedan vivir con tranquilidad», ha apuntado el conseller. Martínez Dalmau también ha hecho referencia a los casos de Alfafar y Torrent, con 245 familias afectadas por un desalojo que, aunque son propiedad de la Sareb, «con más motivo porque es dinero público, haremos lo que esté en nuestra mano para garantizar la viviendas«. También ha apuntado que se ha puesto en contacto con el alcalde de Riba-roja.

El conseller ha explicado que esto ha sido producto de la coordinación entre las dos administraciones públicas, la Conselleria y el Ayuntamiento, además de la sociedad civil y ha agradecido la actuación de la Plataforma Antidesahucios (PAH). Los pisos adquiridos en La Pobla serán gestionados por Ayuntamiento y el Consell para adjudicar a familias necesitadas en alquiler o vivienda social, a través de un convenio.

Los representantes de la PAH, que han estado acompañado a las familias desde que se anunció el desalojo, han celebrado esta noticia. «Si todo se resolviera así no haría falta que existiera la PAH», han señalado, al tiempo que han destacado «la actuación de las autoridades para resolver este problema».

Las 21 familias han recibido con aplausos y con una alegría desbordada la visita de Martínez Dalamau. «Han sido meses de no dormir pero toda lucha tiene su recompensa», ha explicado Ana María Amador, portavoz de los afectados, y «ha sido porque en esta lucha no ha habido colores políticos sino humanidad». «Ahora somo personas, no gitanos» ha añadido y ha asegurado que «van a ser viviendas dignas, aunque seamos humildes».