Entrevista a Gabriela Schneir, gerente de Gesmar 2000
Con una trayectoria de más de 25 años en el sector inmobiliario, Gabriela Schneir es la fundadora y directora ejecutiva de Gesmar2000, una empresa con sede en Alicante y presencia directa en Barcelona y Dubái. Su enfoque estratégico ha posicionado a la firma como un puente clave entre inversores internacionales y el mercado inmobiliario de la Comunidad Valenciana, así como en la apertura de nuevas oportunidades en Dubái, una de las ciudades más dinámicas del mundo. Gabriela, Junto a su esposo, ha consolidado un modelo de negocio especializado en la inversión extranjera y la compra de segundas residencias, garantizando procesos seguros y rentables para sus clientes. Su visión global, respaldada por certificaciones internacionales de prestigio, le ha permitido construir una red de alianzas estratégicas en mercados claves. Además de liderar Gesmar2000, Gabriela es una firme defensora de la profesionalización del sector y la equidad de género en la industria inmobiliaria. Actualmente, es presidenta de AMPSI en la Comunidad Valenciana y vicepresidenta nacional de esta influyente asociación de mujeres profesionales inmobiliarias en España. Su compromiso con el crecimiento del sector la ha llevado también a desempeñarse como docente en programas de especialización inmobiliaria, impulsando la formación de nuevas generaciones de expertos. Con una carrera marcada por la innovación, el liderazgo y la expansión internacional, Gabriela representa el poder de la visión estratégica y el talento femenino en el mundo inmobiliario. -Para usted, ¿qué significa ser una mujer empoderada? Ser una mujer empoderada es tomar decisiones con autonomía, liderar con visión y abrir caminos para otras mujeres en la industria. Es desafiar límites y demostrar que el talento no tiene género. Como directora de Gesmar 2000, mi compromiso va más allá del crecimiento empresarial; busco crear oportunidades para que más mujeres accedan a liderazgos y construyan su legado. El empoderamiento es colectivo: cuando una mujer avanza, se abren puertas para muchas más. Por ello, trabajo activamente en AMPSI. Empoderarse es construir tu camino, transformar desafíos en oportunidades y dejar una huella para inspirar a futuras generaciones. -¿Qué queda por hacer para lograr la igualdad real entre hombres y mujeres? -Hemos avanzado, pero queda mucho por hacer. Primero, es clave cerrar la brecha salarial con retribuciones justas basadas en el aporte profesional y no en el género. La conciliación laboral y familiar sigue siendo un reto. Es esencial implementar medidas que permitan equilibrar ambas esferas. Además, aunque hay más mujeres en cargos directivos, seguimos siendo minoría en las grandes decisiones del sector. Necesitamos visibilizar el talento femenino y eliminar prejuicios. Por último, la educación y la cultura empresarial deben fomentar la igualdad, combatiendo estereotipos de género. Como líderes, tenemos la responsabilidad de contribuir a este cambio. -¿Cómo se trabaja en su empresa para alcanzar esa igualdad? -Gesmar 2000 es una empresa familiar que fomenta un entorno donde el éxito depende del talento, la determinación y el esfuerzo, sin distinción de género. Colaboramos con redes y asociaciones que promueven el liderazgo femenino en el sector inmobiliario y empresarial, participando en eventos donde se destaca el papel de la mujer en la industria. Nuestro compromiso con la igualdad no es solo un discurso, sino una realidad que se refleja en nuestra estructura, nuestras políticas y nuestro día a día. -¿Qué aporta el liderazgo femenino en su empresa? -El liderazgo femenino aporta una perspectiva diferente y resolutiva, basada en la empatía, la capacidad de negociación y la atención al detalle. Estas cualidades son ventajas competitivas en el sector inmobiliario. Las mujeres como madres, esposas y profesionales aplicamos nuestro liderazgo a diario, lo que también significa tener la valentía de enfrentar desafíos cuando es necesario, la flexibilidad para adaptarnos a los cambios y la capacidad de inspirar a otros con el ejemplo. Estas habilidades son clave para el crecimiento empresarial. En Gesmar 2000, el liderazgo femenino ha impulsado el crecimiento del negocio y ha fortalecido nuestra reputación como una empresa moderna, inclusiva y comprometida con la igualdad. Apostar por el talento femenino nos hace más competitivos y sostenibles. -¿Qué beneficios aporta la mirada femenina en la coyuntura actual? -En un contexto de cambio constante, incertidumbre económica y evolución del mercado inmobiliario, la mirada femenina destaca por su capacidad de gestión en entornos complejos y su habilidad para generar confianza con clientes y equipos. Las mujeres tenemos gran capacidad de escucha y diseño de soluciones personalizadas, ofreciendo un servicio más cercano y diferencial. Nuestra mirada enriquece la estrategia empresarial, aportando una ventaja competitiva en tiempos de transformación y digitalización. Un enfoque colaborativo y motivador es esencial para el éxito empresarial.Gabriela Schneir, gerente de Gesmar 2000