Inga Agoshkova es la fundadora y CEO de Supra Legit Lawyers, un despacho de abogados con sede en Valencia especializado en el asesoramiento legal a empresas y startups. Abogada colegiada en el colegio de abogados de Valencia, Inga ejerce como letrada en dos países. Posee tres licenciaturas (derecho y traducción) y una sólida trayectoria tanto en despachos de abogados como en grandes firmas multinacionales, desempeñándose como abogada in-house. Desde 2013 trabaja en el sector tecnológico, destacando por su experiencia en empresas como Huawei, donde comenzó su andadura en la industria IT. Gracias a su formación internacional y a su experiencia profesional en distintos países, Inga domina diversas culturas e idiomas extranjeros, lo que le permite ofrecer un asesoramiento rápido, eficiente y adaptado a las necesidades específicas de cada cliente. En enero de 2022, tras su paso por RSM Spain, fundó Supra Legit Lawyers con la misión de apoyar a emprendedores y empresas a superar los desafíos legales y fiscales que encuentran en su camino hacia el éxito. Supra Legit Lawyers es uno de los pocos despachos de abogados en España que ofrece un servicio integral en áreas legales y fiscales para startups, inversores y emprendedores, sobre todo extranjeros. Además, presta asistencia especializada en traslados internacionales de startups a España. Su expertise abarca múltiples ramas del derecho, como mercantil, laboral, tecnológico y migratorio. El despacho cuenta con una red global de más de 45 abogados especializados en startups, lo que le permite ayudar a sus clientes en su expansión internacional. -Para usted, ¿qué significa ser una mujer empoderada? -Para mí, una mujer empoderada es aquella que posee independencia económica y emocional, sabe lo que quiere y, aunque tenga dudas, reflexiona y toma decisiones acertadas para sí misma. Es una mujer que pide ayuda cuando la necesita, pero nunca la mendiga, y tiene bien definidas sus fronteras personales, con la capacidad de flexibilizarlas o reforzarlas según sea necesario. Amarse a sí misma es clave; al hacerlo, genera una energía positiva que puede compartir con quienes la rodean tanto en el ámbito laboral como personal. Como dicen en los aviones: primero colócate la máscara de oxígeno antes de ayudar a otros. Una mujer empoderada rompe estereotipos, no se rinde ante el fracaso, y vuelve a intentarlo con más fuerza. Aunque pueda sentir miedo frente a lo desconocido, actúa con determinación para alcanzar sus metas. Es crucial encontrar un equilibrio: apoyarse en otros sin volverse dependiente de ellos. La autosuficiencia implica tener la seguridad de que, pase lo que pase, contarás con tus propios recursos para resolver cualquier desafío. Perder un apoyo que se daba por seguro puede ser frustrante, pero se supera, y al hacerlo, la mujer se fortalece aún más. Como decía Oscar Wilde, se puede sobrevivir a todo, menos a la muerte. No debemos olvidar que el mayor desafío de una mujer empoderada es mantener este balance entre ser poderosa y su femineidad que le ha sido otorgada por la naturaleza, encontrando armonía en esta combinación de "poderes". -A su juicio, ¿qué queda por hacer para lograr la igualdad real entre hombres y mujeres? -Aunque no somos iguales por naturaleza ni en capacidades físicas -como sería el caso de trabajos en una mina-, la igualdad de oportunidades es esencial. Es fundamental eliminar el miedo que muchas mujeres tienen al actuar y enseñarles a enfrentarlo con valentía. Esto es clave, especialmente en el ámbito del emprendimiento femenino.
Se necesitan más programas de formación y apoyo para mujeres, sin caer en extremos que discriminen a los hombres. Por ejemplo, exigir la inclusión de una mujer en una startup como requisito para obtener inversión puede ser injusto y verdaderamente discriminatorio. En este caso, me pondría del lado de los hombres. Las mujeres no deben ser incluidas en un equipo solo por diversidad; su participación debe basarse en su formación, experiencia y conocimientos. El cambio no debe forzarse; debe fluir de manera orgánica. Si toma 50 años más, que así sea, pero es crucial comenzar con la educación y formación de las mujeres. Esto no solo las empodera, sino que también las prepara para responder de manera efectiva a desafíos como el acoso laboral, por ejemplo. En mi reciente viaje a Arabia Saudita, participé en un encuentro de mujeres para compartir mi experiencia. Allí pude observar la lucha de mujeres que, aunque sean pocas, están marcando una diferencia y sirviendo de ejemplo en su entorno. Vi lo luchadoras que son las mujeres de esta región: a pesar de las barreras, están impulsando el cambio y motivando a otras a seguir sus pasos. En este contexto, ni siquiera se hablaba de emprendimiento femenino, sino de algo más básico: la incorporación de mujeres en puestos directivos y el reconocimiento de su valor en el ámbito laboral. -En su empresa, ¿cómo se está trabajando para alcanzar esa igualdad? -En Supra Legit Lawyers mantenemos una estricta política de no discriminación, ya sea por nacionalidad, procedencia, idioma, sexo o religión. Además, en profesiones como la abogacía, la medicina o la psicología, los principios éticos nos obligan a ofrecer nuestros servicios sin discriminación, salvo en casos excepcionales de objeción de conciencia, algo que rara vez se aplica. Como abogada extranjera que ha vivido en tres países, me he enfrentado personalmente a la discriminación en diversas formas. Esta vivencia me ha llevado a ser especialmente firme en este tema, y durante las entrevistas con candidatos, dejo claro que cualquier tipo de discriminación es inaceptable en nuestra firma. Solo he tenido una experiencia negativa en este sentido: una candidata manifestó que no estaría interesada en trabajar en el despacho si no renunciábamos a aceptar clientes de una determinada nacionalidad. Este tipo de declaraciones, viniendo de un profesional que, por la esencia misma de su labor, debería guiarse por la ética y la no discriminación, son un ejemplo claro de cómo no debemos actuar. Si hoy se discrimina por nacionalidad, mañana podría ser por género o incluso por casos de acoso entre mujeres. Es fundamental mantener una postura ética sólida y comprometida frente a cualquier forma de exclusión. https://youtu.be/SUFSOAoQUC4 -¿Qué aporta el liderazgo femenino en su empresa? -Como CEO de Supra Legit, considero que las cualidades que he desarrollado son representativas de muchas líderes femeninas. Procuro abordar los problemas desde un enfoque holístico, considerando no solo los resultados inmediatos, sino también el impacto a largo plazo en las personas, la empresa y el entorno. Combino lógica con intuición, optando por una u otra, y aunque me cuesta a veces distinguir cuál de estas habilidades predomina para resolver un problema. Sin duda, ser emprendedora y abogada ha transformado mi carácter, haciéndome más resiliente, pero también me ha permitido aprender a equilibrar mis habilidades femeninas con las exigencias de liderar un negocio. Este equilibrio no solo es un proceso constante, sino también un consejo que ofrezco a otras mujeres trabajadoras: encontrar su propia armonía entre liderazgo y autenticidad. -Ante la actual coyuntura, ¿qué beneficios aporta la mirada femenina? -El principal beneficio es la empatía, una cualidad que muchas veces las mujeres llevamos de manera intrínseca, incluso sin expresarla abiertamente. Sumada a la inteligencia emocional, esta empatía nos permite liderar y guiar de manera efectiva, a menudo sin que sea evidente para quienes nos rodean. Las mujeres suelen encontrar soluciones creativas, apañándose con pocos recursos para lograr grandes resultados. Una mujer suele requerir menos tiempo para procesar y analizar y llega a conclusiones con mayor rapidez y espera que se confirmen sus previsiones. Por último, destaca la capacidad de realizar múltiples tareas y la planificación meticulosa, prestando especial atención a los detalles. La mirada femenina aborda los problemas desde una perspectiva global, considerando múltiples factores y los efectos a largo plazo. Esto enriquece la toma de decisiones y fomenta soluciones más equilibradas y sostenibles. 
Inga Agoshkova, fundadora y CEO de Supra Legit Lawyers