El millar de usuarios de los centros cívicos de Ontinyent se solidarizan con los monitores

Los cerca de mil usuarios de los centros cívicos de Ontinyent se han plantado. Desde esta semana han decidido no acudir a las clases que se imparte en solidaridad con los monitores que aún no han regularizado su situación en cuanto al cobro de las nóminas adeudadas por la empresa hasta ahora encargada de la gestión y no haberse aún materializado el traspaso de los servicios a la nueva empresa local.

"Es muy injusto lo que les está pasando y esta es la única forma de hacer ver al Ayuntamiento que los usuarios estamos con ellos. Vamos a mantener esta postura hasta que el Consistorio haga bien las cosas, porque habían anunciado que todo estaba arreglado y aún no se ha hecho nada", asegura una de las usuarias, Raquel Molla.

Molla indica que este jueves presentó en el registro de entrada la instancia en la que informan de esta decisión de no acudir a clase, así como de las firmas que han recogido en apoyo de los cinco monitores.

"Mientras no se solucione el tema, me quedaré en casa", indica también otro usuario, en este caso del centro de San Rafael, Pepe Belda. "Estamos muy contentos con ellos y lo que les está pasando es un tema muy serio. Dijeron que se había solucionado con una nueva empresa, pero todo continúa igual", apunta.

Belda subraya que se trata solo de 5 personas, con las que la empresa está incumpliendo y por las que el Ayuntamiento no está haciendo nada. "Todos los usuarios estamos a una y hemos recogido firmas, que hemos presentado en el Ayuntamiento, apoyándolos y queremos que se solucione ya".

Por su parte, los monitores están acudiendo a su trabajo a pesar de tener las clases vacías, de que no han regularizado su situación con la empresa en cuanto al cobro (no han podido contactar con ella), ni tampoco han sido aún contratados por la nueva.

Agradecen el apoyo de los usuarios, pero aseguran que esta situación les está desbordando y que alguno de ellos incluso se ha planteado tirar la toalla. "Nos sentimos como marionetas", señalan.

Han podido contactar con un abogado que está llevando el caso de otros trabajadores a los que le ha pasado igual con esta empresa en otros ayuntamientos, en los que sí se ha resuelto su situación porque han sido estos los que se han hecho cargo de las nóminas. "El abogado nos ha dicho que es el Ayuntamiento el que se tiene que hacer cargo de nuestra situación", aseguran.

Lamentan que quince días después de anunciarse que el problema se había solucionado, la situación no ha cambiado.

• Temas
• Ontinyent