El IVAM abre su solar al público

El solar situado detrás del IVAM, destinado en un principio para la ampliación de la pinacoteca y que lleva tiempo olvidado, acogió en la mañana del sábado una iniciativa urbana conocida como Desayuno con Viandantes.

Más de 500 personas se dieron cita en este recinto de 2.800 metros cuadrados para compartir un desayuno o almuerzo en algunos casos con vecinos y ciudadanos.

Esta actividad nace hace seis años, en noviembre de 2008, como iniciativa de siete amigos que, con las ganas de hacer cosas por la ciudad, decidimos hacer uso del espacio público desayunando; con el tiempo ha ido creciendo y se ha desarrollado en diferentes lugares de la ciudad y atrayendo cada vez a más gente, explicó David Estal, uno de los organizadores.

Estamos intentando ocupar el solar del IVAM de una manera simbólica, festiva y lúdica, de cara a plantear que este e solar, que ha estado tantos años cerrado, pues nunca más vuelta a estar de espaldas al barrio, señaló José Miguel Cortés, director del IVAM.

El solar no se había preparado especialmente para la ocasión. El suelo, arenoso, contenía alguna que otra piedra y más hierba y matorrales de los deseables. Sin embargo, todos los asistentes se adaptaron al medio e, instalando cuantas mesas necesitaron, celebraron el desayuno de forma festiva y solidaria.

Me contó la iniciativa una amiga y hemos venido porque nos apetecía; hemos traído una coca, café y té, y como no teníamos nada mejor que hacer, nos hemos venido a desayunar, destacó Paula Martínez, joven valenciana.

Hoy me hacía una ilusión especial por el sitio donde se celebra, y sobre todo por la nueva época que abre para el IVAM y para todos los amantes del arte unido con la ciudad, confesó Maota Soldevilla, veterana en esto de los Desayunos con viandantes. La ciudad es de todos, y todos la podemos disfrutar; esto es una manera de llamar la atención sobre espacios que están sin uso y que sería bueno reutilizarlos, añadió.

Es un deseo de tumbar metafóricamente estas vallas para que este solar se abra a los vecinos y estos entiendan que el solar es parte del barrio y de la ciudad, y también del museo, y que barrio y museo deben caminar juntos para hacer una ciudad más agradable, vivible y democrática, destacó el director del IVAM.