La Safor más monacal

Los dos monasterios que componen esta ruta, el de Sant Jeroni de Cotalba, en Alfahuir,y el de Santa María de la Valldigna, en Simat, ofrecen al visitante una aproximación a la vida religiosa de finales de la Edad Media, basada en la oración y en la contemplación divina, pero que incluye el trabajo físico como parte de esa relación espiritual con Dios.

El viajero puede observar la evolución de la arquitectura en los casi cien años que separan la edificación de estos dos monumentos. El excursionista será consciente de los cambios y adelantos en la construcción y en la concepción de esa relación entre el hombre y la divinidad. Un modo diferente de conocer La Safor, alejado del típico turismo de sol y playa.

La ruta comienza en Alfahuir, a ocho kilómetros de Gandia. Este pequeño pueblo alberga el monasterio de Sant Jeroni de Cotalba (Autovía Gandía-L'Ollería (CV-60), salida 35). Para acceder al monumento es necesario seguir el camino del Molí de la localidad.

Se encuentra edificado sobre el altozano de Cotalba y cuenta con un entorno natural privilegiado. Hoy en día sus obras de arte se conservan almacenadas en el Museo de Bellas Artes de Valencia. En el monasterio se puede contemplar una maravillosa Santa Cena realizada con la técnica del temple, que se encuentra en una de las paredes del refectorio.

Es una de las construcciones monásticas más importantes y mejor conservadas de la Comunitat Valenciana. El estilo arquitectónico mezcla trazos de una primitiva estructura gótica medieval del siglo XIV con los adelantos técnicos propios de los siglos XV al XVIII, en los que se llevó a cabo la edificación del monumento. En sus paredes conviven elementos mudéjares, góticos, barrocos y neoclásicos.

El excursionista puede disfrutar de visitas guiadas al monasterio y pasear por el patio de entrada, la torre gótica, el patio de los naranjos, el refectorio o incluso en la antigua cocina de los frailes. Además, el paseo incluye acceso a los impresionantes jardines románticos del recinto y al acueducto gótico que lo rodea. La duración aproximada de la visita es de una hora y media, que incluye una proyección audiovisual sobre la historia del monumento. Los viajeros pueden acceder al monasterio los fines de semana y contar con una visita guiada a las 11.30 horas los sábados y domingos. El precio de la entrada es de cuatro euros para el público general, pero cuenta con descuentos para estudiantes y jubilados. Los niños menores de siete años pueden entrar al monasterio gratuitamente. El excursionista puede optar por realizar una 'visita premium', que le permitirá el acceso al claustro superior, caracterizado por una espectacular belleza, donde destacan sus esculturas góticas policromadas.

Para llegar al segundo punto de la ruta, el viajero debe tomar el camino del Monasteri hasta enlazar con la carretera CV-675, que le conducirá hasta el monumento de Santa María de la Valldigna de Simat (plaza de la Abadía, sin número), a veinte minutos en coche de Alfahuir. El monumento, construido a finales del siglo XIII, es una muestra de la arquitectura de diferentes épocas y marca tres etapas principales: la implantación gótica del siglo XIV que conforma la estructura completa del conjunto alrededor del claustro de acuerdo con los cánones del Cister; la importante renovación sufrida tras las destrucciones del terremoto de 1396; y su segunda rehabilitación y definitivo enriquecimiento después del nuevo terremoto de 1644, con sustituciones completas y nuevas dependencias, ya de etapa barroca, de los siglos XVII y XVIII.

El horario de visitas es de lunes a domingo, de 9 a 15 horas y de 16 a 18 horas. El monasterio cuenta con rutas guiadas los miércoles y viernes de 10 a 14 horas y los domingos de 11 a 14 horas. El acceso al monumento es gratuito.