El Institut Valencià de Cultura recibe 20 propuestas para ocupar las tres direcciones

Año y siete meses es tiempo suficiente para acometer cambios en la gestión pública y, sobre todo, para nombrar a responsables de las instituciones artísticas. Así ha sucedido en la Comunitat tras el relevo en el Consell y así continuará porque aún falta por completar las direcciones adjuntas del Institut Valencià de Cultura (IVC), antes llamado CulturArts.

La Conselleria de Cultura, en manos del equipo de Vicent Marzà, ha renovado a todos los gestores de la anterior etapa. Ya sea por concurso público o por designación directa, el relevo en las direcciones de organismos y festivales se ha llevado por delante a responsables veteranos, desde Felipe Garín al frente del Consorcio de Museos hasta Rafael Maluenda, que fue director de Cinema Jove durante más de 15 años.

La Generalitat optó por concurso público para las direcciones del IVC, cuyo plazo para presentar candidaturas concluyó el pasado 13 de enero. Cultura ha recibido un total de 20 propuestas, 15 de ellas fueron presentadas por hombres y sólo cinco por mujeres. Ellas están en minoría.

Se da la circunstancia de que los nombramientos de los últimos gestores culturales han sido hombres: Abel Guarinos, al frente del IVC; José Luis Pérez Pont, como responsable del Consorcio de Museos (ambos directores seleccionados por concurso público); mientras que Cultura designó directamente a Juan Vicente Martínez Luciano, responsable de Sagunt a Escena y a Carlos Madrid como director de Cinema Jove. En la elección de José Ignacio Casar Pinazo, que sustituyó a Paz Olmos en la dirección del Museo de Bellas Artes, no ha habido concurso público sino que se realizó un proceso de provisión de plazas dependiente de Función Pública. Este proceso sirvió para legitimar y afianzar al director al frente de la pinacoteca, como publicó LAS PROVINCIAS en junio de 2016. La intención de la conselleria es sacar la plaza del director del Bellas Artes en concurso abierto en virtud del Código de Buenas Prácticas. Desde Cultura sostienen que se han de modificar los estatutos para que la Generalitat pueda cubrir la plaza por convocatoria abierta.

La dirección que más solicitudes ha recibido es Música y Cultura Popular con 11 candidaturas, seguida de Audiovisual y Cinematografía (5 propuestas) y Artes Escénicas (cuatro proyectos).

La selección de las personas que ocuparán las direcciones adjuntas de Artes Escénicas, de Audiovisuales y Cinematografía, y de Música y Cultura Popular Valenciana se realizará a través de una comisión de valoración específica para cada una de las áreas. El jurado se formará atendiendo a los criterios del Código de Buenas Prácticas, como sucedió en el caso de CulturArts y del Consorcio, es decir, estará compuesto por tres miembros de la administración titular; tres representantes de la sociedad civil relacionados con el mundo cultural y tres expertos y/o científicos del ámbito artístico concreto.

Con el nombramiento de las tres direcciones adjuntas se habrá completado la renovación del IVC, a falta de la designación de los delegados en Castellón y Alicante, que Cultura prevé cubrir con funcionarios. También queda abierto el futuro del Instituto de Conservación y Restauración (IVC+R), entidad que dirige Gemma Contreras. Como informó LAS PROVINCIAS, la conselleria estudia integrar estas competencias en la dirección general de Patrimonio. De materializarse, Cultura debería asumir la plantilla del instituto que contempla una infinidad de variedades de contratos. Tampoco está definido si fuera del IVC, la entidad continuará como instituto, será una unidad propia o se creará otra institución específica. Otro de los retos de la posible transformación jurídica del IVC+R hace referencia a las ayudas europeas a las que accede como instituto autónomo y a la posibilidad de realizar trabajos fuera del ámbito autonómico. La conselleria analiza los pros y los contras. Todas las opciones están sobre la mesa.