Amparo Carbonell: «Veo imprescindible la ampliación del Museo Nacional de Cerámica»

Amparo Carbonell (Valencia, 1955) es Catedrática de Procesos Escultóricos de la Facultad de Bellas Artes de la Universitat Politècnica de València (UPV) y la primera mujer que se ha incorporado a la sección de escultura como Académica de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia. Su actividad creativa es la escultura. Ahora expone en el Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí la muestra 'Alrededor de un plato'. Con LASPROVINCIAS habla de la exposición, pero también de la necesidad de que se preste mayor atención al González Martí. Al mismo tiempo recuerda a los políticos que interesarse por la cultura y cuidarla es «una obligación».

–¿Qué ofrece al público con su exposición 'Alrededor de un plato'?

–Ofrezco un viaje al mundo de mi infancia, de mis recuerdos. Pero también un viaje hacia dentro de uno mismo. Quienes vengan a vela se podrán identificar con esos recuerdos. Esas sobremesas eternas que teníamos en verano o cuando llegaba el buen tiempo con amigos, y eso, que no los ha quitado la pandemia. A mí me ha supuesto volver a la infancia, a las sobremesas en las que he aprendido todo lo que sé.

–Usted es escultora, ¿sigue siendo esta manifestación creativa la gran desconocida del arte?

–Lo sigue siendo. Cada día estoy más segura de que es así. Es un arte con el que la gente todavía no tiene el hábito de hablar. Puede hacerlo con cualquier cosa menos con una escultura, y estas tienen un lenguaje facilísimo. Todavía está muy maltratada.

–En el caso del público valenciano, ¿cómo es la relación con el arte y en particular con la escultura?

–En Valencia jugamos un poco con ventaja. Estamos más habituados a ver esculturas. Encontramos normal, de repente en marzo, doblar una esquina y ver doscientas figuras que rompen el espacio, que hablan contigo. Eso también son esculturas. Todo lo que entabla una relación contigo y el espacio, y dialoga, funciona muy bien. Y en Valencia contamos con esa ventaja. Tenemos mucha más familiaridad con la relación entre la forma y el espacio.

–'Alrededor de un plato' se muestra en el museo González Martí. ¿Qué le parece el trato que recibe este espacio por parte del Ministerio de Cultura, que es su titular?

–Como todos los museos. Necesitamos que el ministerio se ocupe mucho más de esos espacios y de la cultura. El Museo de Cerámica, que es fantástico, creo que necesitaría una atención especial.

–El Museo Nacional de Cerámica está pendiente de una ampliación que no se materializa.

–Nunca llega. Hace falta mucha dedicación a este museo. Tiene unas colecciones maravillosas y esa ampliación la veo imprescindible.

–También es usted miembro del patronato del Museo de Bellas Artes, ¿cómo ve el trato del ministerio a este espacio?

–Ha pasado por varias etapas, con las reformas. Sí que está teniendo una línea de atención. No son comparables los dos casos.

–¿Y la situación cultural en la Comunitat, con carácter general, cómo la ve?

–Todo lo que se haga es insuficiente. Y eso que la Comunitat Valenciana la cultura siempre está muy viva, hay hambre de cultura y un público muy receptor. Es un caldo de cultivo donde se puede desarrollar cualquier cosa. Pero ocuparnos más de la cultura parece que siempre nos queda pendiente. La cultura es un montón de cosas, no sólo son los cuadros y esculturas.

–¿Cree que a los políticos les interesa la cultura?

–Creo que es su obligación que les interese. Están obligados a sentir interés por la cultura y también a cuidarla.