

Secciones
Servicios
Destacamos
EP
Viernes, 28 de septiembre 2018, 01:00
valencia. Fundación Bancaja ha condensado la exposición 'Miquel Navarro. Fluidos' en un catálogo que recorre más de 40 años de producción del artista valenciano. La publicación de 140 páginas fue presentada ayer en presencia del presidente de la Fundación Bancaja, Rafael Alcón, el propio Navarro y los autores que han participado en el mismo: el escritor y crítico de arte Juan Manuel Bonet y la comisaria de la muestra, Lola Durán.
El catálogo recoge las piezas de la exhibición que puede visitarse hasta el 11 de noviembre. Incluye la reproducción de las obras presentes en la muestras, datadas entre 1976 y 2018 y procedentes de las colecciones del artista, de la Fundación Bancaja y de la Fundación Caja Mediterráneo.
El catálogo repasa la evolución de la obra de Miquel Navarro y la interpretación de sus principales ejes temáticos, la ciudad y el cuerpo humano. Además, lleva al soporte impreso obra inédita del escultor como las instalaciones 'Ciudad de las torres' (2018) y 'Marjal' (2017-2018); las esculturas 'Casco de avispa' (2012), o 'Campo rojo '(2016). Diseñado por Boke Bazán y su estudio Nociones Unidas, muestra no solo obra escultórica de Miquel Navarro sino también sus creaciones en otras disciplinas artísticas como la fotografía, la acuarela o el dibujo.
Miquel Navarro destacó que la exposición de Fundación Bancaja es «muy elegante», se «ve muy bien» y que, en papel, «está muy bien explicada. Aunque reconoció «no ser un hombre de letras» y defendió que «la imagen tiene que expresarse por sí misma». «He aprendido mucho de la opinión de los críticos e historiadores», manifestó. Miquel Navarro, preguntado sobre la relación entre poder y abismo, subrayó que «cuando cae el poder, se produce el abismo, y el poder lo perdemos todos». Los rascacielos de sus ciudades son el «poder, y el poder es el abismo». Además, ha relacionado también el poder con el suicidio.
Sobre la presencia del sexo en su obra y preguntado por la reciente polémica por las esculturas eróticas de Antoni Miró en la Marina, Navarro eludió pronunciarse porque no tiene «nada que ver». Dijo no saber si su propia obra es «erótica o si es pornográfica», porque no sabe «distinguir» entre ambos calificativos. «Yo hago lo que siento. No me excito con mi obra, pero me puedo emocionar», recalcó.
Por su parte, Lola Durán destacó que 'Miquel Navarro. Fluidos' es la exposición «más antológica» del artista, y el catálogo que la recoge se estructura en sus dos temas más representativas: las ciudades y el cuerpo humano. En las ciudades, «pequeñas piezas se extienden en el espacio y van organizándose en él», ha detallado. Se trata de elementos «desiguales», «fálicos» y «totémicos» que simbolizan tanto «poder» como «abismo», ilustró. Se trata, señaló, de una obra «sensual», explícita», donde a veces el «elemento sexual se aleja del amor y se presenta dolorosa», como «pena» pero también «renacimiento».
Juan Manuel Bonet destacó la pieza más antigua, 'Sèquia', y las cuatro ciudades que recoge la exposición, entre «laberintos que yuxtaponen materiales»; 'Espacio de Batalla', una obra «eléctrica» y «febril» o 'El Marjal', un espacio más natural de «paz y quietud» con el que el especialista sintió «amor a primera vista», al ser una creación «inesperada» que describe Valencia y su entorno.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.