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El 'maestro del broche dorado'. El padre del beso más icónico de la historia del arte. Un creador único que despuntó en las vanguardias europeas. El artista Gustav Klimt será el protagonista de una exposición diferente, virtual, con salas llenas de colorido, que recalará el próximo mes en Valencia.
Concretamente será el Ateneo Mercantil de la ciudad el escenario donde se instalen las miles de imágenes que conforman 'El oro de Klimt', una propuesta que siguiendo la estela de la exhibición interactiva 'Van Gogh Alive', pretende, sin tener que instalar las obras más icónicas del pintor austriaco, recorrer su trayectoria con las imágenes de cuadros como 'El beso' y 'El retrato de Adele Bloch-Bauer'.
Esta última pieza es una de las protagonistas de una exhibición que mezcla la última tecnología con imágenes, proyecciones y música. «Esta primavera en Valencia será dorada ¡o no será! Muy pronto el Ateneo Mercantil de Valencia se va a vestir de oro para acoger la exposición inmersiva más popular de los últimos dos años. ¡Os esperamos!», reza una de las publicaciones en una red social en las que los responsables de la exposición anuncian su estancia en la capital del Turia.
De la mano de la empresa Nomad Art, 'El oro de Klimt' traerá a Valencia el beso más recordado de la historia de la pintura. La exhibición llega tras haberse podido ver en ciudades como Sevilla y Málaga. En esta última se exhibía justo cuando se decretó el estado de alarma derivado por la pandemia. Tras un año de parálisis en la cultura por el Covid-19, la muestra emprende el vuelo y recalará en sólo unas semanas en la ciudad.
Imágenes en movimiento, música, una 'ilusion room', salas informativas e, incluso, esencias aromáticas, son sólo algunas de las maneras en las que la obra del pintor cobra vida. Los retratos y paisajes más conocidos de Klimt junto a su manejo del dorado y del color se instalarán justo en el centro de la ciudad.
«Gracias a esta nueva forma de acercar el arte al público, tanto niños como mayores, viajarán en el tiempo hacía la época dorada de las vanguardias europeas», destacan desde la empresa organizadora. Aseguran que el público «podrá fijarse en cada color, cada pincelada, se sentirá dentro de cada obra como si fuera un personaje de la época. Una forma diferente de pasar un día en familia rodeados de arte».
«Exquisitas piezas musicales y miles de imágenes en movimiento sobre la obra de Guustav Klimt, a gran escala, en una habitación donde paredes, suelo y ornamentos arquitectónicos cobran vida para transportarnos a un mágico lugar: el corazón del artista», reza la descripción que hacen en su página web.
La ciudad de Valencia tendrá así la oportunidad de rendirse a un artista que se definía como un autor que sabía «pintar y dibujar». «Yo mismo me lo creo, y también otras personas dicen que se lo creen. Pero no estoy seguro de que sea cierto», decía.
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