La mayoría de salas de cine de Valencia deciden el cierre temporal

Los cines no aguantan más. La pandemia y las medidas que ha impuesto han estrechado los canales de respiración en los escenarios de pase de películas hasta el punto de que esta semana la práctica totalidad de salas de Valencia han anunciado el cierre temporal. A la decisión de los cines Lys y los Yelmo se han sumado también los Babel, donde a partir del 1 de febrero y hasta una nueva determinación, no habrá sesiones. Kinépolis ha tomado el mismo camino y ya esta semana no ha ofrecido programa, como destacaron los responsables de las distintas salas.

Cinesa, compañía propietaria de las salas del Centro Comercial Bonaire ha adoptado una solución intermedia. No ofrece películas los lunes y los martes, pero sí el resto de los días, según explicó a LAS PROVINCIAS el gerente del espacio, Enrique Navarro. Los cines ABC, en sus distintos emplazamientos, mantendrán las puertas abiertas, como confirmó su director, Enrique Pechuán. También han anunciado programación Cinestudio d'Or y hasta el 4 de febrero los cines Aqua.

La bajada de persianas durante el confinamiento, la posterior restricción de aforos, el establecimiento del toque de queda nocturno –que obligó a reducir el número de sesiones–, la prohibición de venta de bebida y comida en las salas, y las últimas restricciones que obligan a la clausura perimetral de ciudades de más de 50.000 habitantes han pasado una factura inasumible para un sector que, tal como señaló, Antonio Such, presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios de Cine (Avecine) y propietario de los Babel, «ya llevábamos mucho tiempo trabajando a pérdidas sólo con dos sesiones».

Such insistió en que no se puede establecer un factor clave para desencadenar esta situación, sino que a su juicio lo que se ha dado es «una superposición» de circunstancias que han descrito «la tormenta perfecta». Such recalcó que en las últimas semanas la difícil situación en la que se encuentra la Comunitat dada la incidencia del Covid entre los valencianos, ha llevado a que muchos ciudadanos, aun cuando conocen que los cines «son seguros» están adoptando la decisión de quedarse en casa, algo que implica que tampoco van al cine.

A los acontecimientos señalados, que han marcado el año 2020 y se han extendido hasta este primer mes de 2021, el presidente de Avecine añadió las dificultades que está sufriendo la distribución de cintas: «Las películas siguen sin llegar», lo cual también dificulta la programación. Sobre esta cuestión también se pronunció Valentín Illera, responbsable de Aqua, quien apuntó que van a mantener las salas abiertas con películas europeas porque no llega el cine norteamericano.

Luis Esteban. director de Kinépolis en Valencia, apuntó que dada su localización en Paterna, uno de los municipios afectados por el cierre perimetral, la situación «no es viable», y refirió también que el cierre de la hostelería también les ha afectado puesto que «ir al cine es una experiencia que va acompañada de tomar un café o cenar» y eso no se puede hacer.

Esteban también apuntó que son varios los factores que se han dado cita en torno a su actividad para desembocar en la situación actual y recordó, además, que en en las últimas semanas se ha notado mucho «el mensaje del autoconfinamiento».