Cuenta atrás para los cuadros del Círculo

La subasta de las obras de arte de la colección del extinto Círculo de Bellas Artes llega a su último día. Hoy termina el plazo para la presentación de pujas. El destino de la colección inicia así su cuenta atrás desde que el juzgado número 4 de lo Mercantil acordara el pasado 1 de octubre dar publicidad a la venta de dibujos, cuadros y esculturas de la histórica entidad que tras entrar en concurso de acreedores se extinguió en mayo de 2019.

Las pujas se tenían que presentar en sobre cerrado. A la finalización del procedimiento se abrirán para conocer los mejores postores y proceder así a la adjudicación de las piezas. Según pudo saber LAS PROVINCIAS, este paso podría llevar unos días, dándose la circunstancia, además, de la coincidencia con fechas de festivos.

Tres meses de un recorrido iniciado en octubre y que hoy alcanza su último tramo han estado salpicados de incidentes. El primero se produjo pocos días después de que se abriera el plazo para pujar por las obras. Como publicó LASPROVINCIAS 90 piezas de la colección del Círculo –entre las que había trabajos de Ignacio Pinazo, Rusiñol y Benlliure– no figuraban en el centenar de obras incluidas en la subasta para obtener el dinero con el que saldar la deuda que arrastró a la entidad a su disolución.

La situación desencadenó días después el inicio de una investigación policial. Desde la Conselleria de Cultura confirmaron en ese momento que el departamento autonómico estaba trabajando «en coordinación con la Unidad de Patrimonio de la Policía Autonómica para esclarecer los hechos». Además, anunciaron que en la subasta la conselleria «hará todo lo posible para que no se pierda este patrimonio».

A mediados de noviembre, como también publicó este diario, se conoció que la Policía había requerido a exmiembros del extinto Círculo de Bellas Artes de Valencia documentación relativa a las últimas etapas de la centenaria entidad para esclarecer el extravío de las obras de los fondos de la entidad.

A estos acontecimientos se sumó más adelante un incidente concursal que llevó, a mediados de este mes, a una decisión judicial que suspendía la subasta de las obras de Ignacio Pinazo incluidas en la colección. A este punto se llegó después de que la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos tuviera conocimiento de la existencia de un documento de 1917 que expresamente señala que «constituido el Círculo de Bellas Artes de esta ciudad, se procede a la entrega de los referidos cuadros pintados por el difunto Ignacio Pinazo cuya entrega verifican sus herederos para que los disfrute el expresado Círculo de Bellas Artes, mientras lleve la finalidad artística que hoy cumple dicha entidad y el día que esto deje de ocurrir, pasarán dichos cuadros a la Real Academia de San Carlos de esta Ciudad, con destino al Museo Provincial de Valencia», el Museo de Bellas Artes.

Ante este hallazgo, que hacía referencia a 17 piezas del artista de Godella, la Academia dirigió un escrito al administrador concursal reclamando las obras. La respuesta fue que era preferible una resolución judicial. La Academia interpuso demanda ante el juzgado número 4 de lo Mercantil obteniendo el 17 de diciembre como respuesta del juez que «se acuerda la suspensión de la liquidación de la masa activa en relación a los cuadros del incidente concursal». También han reclamado que cuando se esclarezca el extravío de obras se les entreguen las de Pinazo que están entre ellas.

El pintor de Godella quedaba fuera, pero la subasta seguía adelante con el resto de piezas por las que hasta hoy se pueden presentar pujas para una venta en la que Cultura tiene derecho de tanteo y retracto para poder adquirir piezas.