Desnudando a Marta Robles

Nacimiento: Madrid, 1963.

Lo que la dice la Wikipedia Es una periodista y escritora española. Licenciada en Ciencias de la Información, rama Periodismo, por la Universidad Complutense de Madrid, comienza a trabajar, antes de terminar la carrera en la revista Tiempo en 1987. En 1989 daría el salto a la radio.

Por Carmen Velasco

Los rostros populares de los medios de comunicación se prestan a ser valorados con lugares comunes. Siempre es aconsejable acercarse a ellos aparcando los prejuicios. Es el caso de Marta Robles. Habitual de la pequeña pantalla, la periodista madrileña no se ha conformado sólo con la información. Desde hace años se labra un camino literario. Madre del detective Tony Roures, Robles es una habitual de los festivales del género 'noir', entre ellos, Valencia Negra. El título 'La chica a la que no supiste amar' obtuvo el Premio de Narrativa Castellón Letras del Mediterráneo. En esta novela, Robles aborda la prostitución y la trata de blancas. La lucha contra la explotación sexual es un compromiso que comparte con su amiga Mabel Lozano ('El proxeneta').

Con más de una quincena de títulos, Robles no deja la prensa escrita donde empezó en el semanario 'Tiempo' en 1987. En la actualidad firma la columna 'Diario de una mujer políticamente incorrecta' en 'La razón', pero ha sido la televisión la que ha granjeado popularidad a la periodista, que también ha trabajado en la Ser, Onda Cero y Punto Radio, entre otras emisoras. Miembro de la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión, ha presentado informativos, magacines y hasta tertulias con Jesús Hermida.

Robles tiene numerosos premios e incluso un reconocimiento berlanguiano: el Museo del Calzado la eligió como la mujer mejor calzada de España en 2008. En el jurado de tal distinción participó Luis García Berlanga.

Lectora omnívora, creció en una casa con enciclopedias y libros de Derecho y Economía por el trabajo de su padre, quien no vio con buenos ojos que Robles quisiera ser periodista.

Por Laura Garcés

-¿Qué pesa más en la Historia de España el sexo o las guerras?

-El sexo y las guerras casi por igual. Lo que pasa que el sexo, mejor dicho la pasión muchas veces determina cómo se afrontan las guerras. Felipe V estaba obsesionado con el sexo sólo se lo podía quitar de la cabeza cuando iba al frente.

-¿Qué es lo que más detesta de la mascarilla?

-Que a veces las sonrisas de la mirada no son lo suficientemente sinceras.

-¿Dispuesta a vacunarse?

-Por supuesto.

-¿Un defecto inconfesable?

-La impaciencia y la inseguridad, aunque esta ya la he confesado más veces.

-¿De qué manía le gustaría desprenderse?

-De ponerme una bata de terciopelo que para mí es como la mantita de Carlitos. Necesito esa bata cochambrosa para vivir y ya me ha dicho mi marido 500 veces que la tire. Y no soy capaz.

-¿Si no escribiera qué haría?

-No concibo la vida sin escribir y sin leer. Si no escribiera, leería siempre.

-¿Siempre dice la verdad?

-No. Antes callar que mentir, pero a veces miento.

Por Noelia Camacho

El último libro de Marta Robles ahonda en las 'Pasiones carnales' de los monarcas españoles hasta Alfonso XIII. De sus propios deseos ocultos y oscuros, la periodista apenas suelta prenda como si hace de los grandes monarcas de la historia de España. Lo que sí desvela son algunas de las manías que conserva a la hora de escribir, su pasión más confesable.

«Cada vez que empiezo con el proyecto de un libro me compro una bolsa enorme de ositos de goma, de gominola, y me la escondo en uno de los cajones de la mesa. Cada tarde, porque la escritura es para mí una rutina diaria, me como algunos. Parece a que cierta hora, mi organismo me pide algo de azúcar y empiezo por morder las orejas de los ositos», asegura la autora y periodista.

Pocos conocerán que, además, a la hora de trabajar en un proyecto literario, Robles requiere de una pelota fitball, las que se utilizan en pilates, para estar sentada. «Cuando escribo, soy capaz de olvidarme completamente del mundo exterior. Puedo llegar a estar hasta doce horas y, en los últimos tiempos, notaba que se me dormían las piernas. De ahí que recurriera a este objeto para encontrar algo que solucionara ese problema», relata la autora.

Para ella, la pandemia ha hecho que nos demos cuenta de que «no necesitamos tantas cosas».

No se plantea escribir algo inspirado en la actual crisis sanitaria. Ni tampoco, y aunque haya buceado por las alcobas de los reyes de España para su último libro, piensa en hacerlo sobre la biografía del Rey Emérito. «Considero que para ciertos temas hay que tener la perspectiva que dan los años y no hacer literatura condicionada por las informaciones», asevera.