El fotógrafo Spencer Tunick busca en Valencia localizaciones para su próxima intervención

Spencer Tunick es un fotográfo que firma con la palabra controversia en cada instantánea que realiza. Su sello de identidad y aquel que le ha catapultado a la fama no deja indiferente a nadie. El estadounidense de origen judío es conocido por realizarfotografías de personas desnudas en espacios públicos, siempre con una visión artística.

Ahora Tunick visita la ciudad de Valencia. Bajo el marco del festival 'Intramurs', llega a la capital del Turia con el fin de concretar la localización de su próximo trabajo fotográfico, el cual tendrá como telón de fondo lugares emblemáticos de la ciudad. Pero no es la primera vez que trabaja en territorio nacional ya que en junio de 2003 fotografió a 7.000 personas en Barcelona.

Los orígenes de su peculiar colección fotográfica residen en las calles de Nueva York, en el año 1992, donde comenzó a retratar personas desnudas. Estas fotos se hicieron conocidas rápidamente, y su 'modus operandi' fue traspasando fronteras. Su trabajo se extendió a otros lugares de Estados Unidos y, posteriormente, hizo una gira internacional, 'Desnudo a la Deriva', en ciudades como Bogotá, México, Londres, Buenos Aires, Melbourne, Newcastle, Viena, entre otros puntos del mapa.

La polémica siempre le ha acompañado y es que el fotógrafo ha sido arrestado en varios ocasiones. Una de ellas, en 1994 con una modelo que posaba desnuda en el Centro Rockefeller de Manhattan. El récord de personas fotografiadas lo logró en mayo de 2007, en la Ciudad de México cuando consiguió reunir en esta ciudad a unos 19.000 participantes que se desnudaron. Estos modelos, como el resto de las personas que aparecen en sus fotografías, son voluntarios.

Sus imágenes siempre dan como resultado un debate sobre cuál es el límite entre lo público, privado y prohibido. Pero dicho resultado es, ante todo, espectacular por el volumen de medios humanos, técnicos y logísticos que intervienen en la creación de una instantánea, todo gracias al talento de Tunick como director que moldea a cada persona y la sitúa en un espacio concreto.