Ese íntimo contacto entre madre e hijo

Laura Yerpes es interiorista, sin embargo cuando ha elegido su pintura favorita de Sorolla para convertirse en guía de LAS PROVINCIAS en el recorrido por la obra del universal valenciano, descubre predilección por un lienzo de exterior, de ese espacio que tanto gustaba pintar al maestro de la luz. La cicerone de este Lunes de Sorolla, que confiesa su pasión por el legado del pintor a la Historia del Arte, se queda con 'Saliendo del baño', lienzo que recogió la luz de la playa de la Malvarrosa en 1915 y hoy forma parte de los fondos de la Casa Museo Sorolla de Madrid.

Las razones que llevan a Laura Yerpes a inclinarse por este óleo son varias, pero vienen a resumirse en un concepto, en una realidad emocional que poco parangón encuentra en la vida, pues viene determinada por el más especial de los vínculos afectivos, por el más grande de los amores humanos. Dice la interiorista que en el cuadro ve «un retrato de la intimidad familiar, de la relación entre madre e hijo».

La guía se inclina por «las emociones» que le transmite el cuadro y que la llevan a hablar de «ternura» cuando contempla al niño envuelto en la toalla y en brazos de la madre. El protagonista de la escena es el mar, un retrato de la playa, pero qué duda cabe de que, como ya ha apuntado, la mujer y el niño forman parte del mismo, como también la barca que se observa en una de las esquinas del óleo y que lleva a Laura Yerpes a pensar que puede tratarse de una «metáfora, del símbolo de travesía o transición de la vida de infancia a la de adulto». También observa Laura Yerpes que el cuadro pone ante el espectador la posibilidad de encontrarse con elementos de la vida cotidiana, algo que responde al costumbrismo que acompaña buena parte de la obra del artista.

No cabe duda de que la contemplación por parte de la interiorista le ha llevado a exprimir al máximo cada elemento de los enmarcados. Ha hecho mucho más que pasar y ver, ha mirado en profundidad, y no sólo la imagen recogida, sino también la manera en la que Sorolla inmortalizó un instante de tanta «ternura» y en el que queda plasmada a la perfección la necesaria «conexión entre las personas», un principio que nuestra guía de hoy defiende hasta el punto de que es un concepto que concede contenido a sus propios proyectos de interiorismo.

El juego de colores, «azules, malvas, corales», la pincelada suelta y «cómo Sorolla consigue captar el movimiento, la espontaneidad que traslada una inconfundible y personalísima frescura» a la obra del valenciano son también características que han llevado a Laura Yerpes a enamorarse de esta pieza.

La proximidad interna y emocional que la interiorista manifiesta con 'Saliendo del baño' la lleva a identificarse con el colorido y la luminosidad. Así no sorprende descubrir, al escuchar sus afirmaciones en torno a la obra, que en su trabajo apuesta por algunos de esos tonos en el deseo de trasladar a los interiores que habitan las personas la tranquilidad que para ella despide el mar y cuanto le acompaña.

Muchos motivos para escoger un cuadro. O tal vez sólo uno: el enamoramiento de una pintura que es paisaje natural y humano, por tanto escenario cultural. Todo ello sobre un lienzo de 130 X 150,50 en el que Joaquín Sorolla muestra la grandeza de su creatividad en madurez bajo una línea pictórica que bebe del impresionismo y el luminismo que impregnaron de fuerza creativa la genial paleta del artista.

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