Joaquín Camps: «He escrito un thriller para pensar, pero sin adoctrinar, que es algo que no soporto»

–¿Qué quiere transmitir con 'La oscuridad que habita en mí'?

–Es un thriller, mi tercera obra de este género. Tengo otras tres novelas de carácter intimista. Escribo porque me apetece leer, y a un thriller le exijo que entretenga. Por eso me he esforzado para que el argumento atrape, considero que ésta es una condición necesaria, pero no suficiente. Además de entretener, me gustan los thrillers que me hacen pensar y lo he buscado con personajes que tengan carne, contenido. Esa combinación diría que es la novela, un argumento que atrapa y personajes que te hacen pensar.

–Si pensar ahora no se lleva, ¿o qué?

–Pues vamos a intentar ir contracorriente. Lo que no soporto es adoctrinar o moralizar, pero a través de la protagonista, Cameron, una chica americana, guapa, joven, una 'influencer ' de moda que se viene a Barcelona buscando el sueño europeo, empieza siendo una mujer frívola que gracias al crimen en el que se ve envuelta se ve cómo evoluciona para ser una mujer auténtica. A través de la voz de Cameron, la que narra en primera persona, me permite introducir reflexiones. Te apetece saber cómo se resuelve el crimen y a la vez cómo evoluciona la historia de amor y desamor que estructura la novela.

–¿Qué encierran las 'influencers' para tener tanto atractivo como personaje literario?

–Cameron es 'inlfuencer' porque me interesaba para el argumento, era conveniente. Pero es verdad que las redes sociales, que están tan de moda, por cuestiones positivas y negativas, las aprovecho también para una serie de reflexiones. Cameron al principio vive muy hacia afuera, en la frivolidad de las redes sociales, pero poco a poco se da cuenta de que hay otra manera de entender las redes con un proyecto que se llama 'Tu postal secreta' y descubre que vale la pena vivir un poco más hacia adentro, no tan hacia afuera en la búsqueda de la autenticidad vital.

–¿De cierta forma hay una defensa de las redes sociales en su novela?

–Creo que lo que hay es una reflexión sobre una racionalización de las redes sociales. No es una cuestión de defender.Es como un cuchillo, que se puede utilizar para cocinar platos maravillosos o para matar. El cuchillo es un instrumento y hay que racionalizar su uso.

–Ante esto, ¿la literatura ya bebe de las redes sociales?

–La literatura debe funcionar como funciona el mundo que acredita y los personajes para ser creíbles no pueden ser caricaturas, que por desgracia en el género es muy habitual. Para que un personaje tenga carne y sea creíble tiene que vivir en el mundo que le rodea, y ahí están las redes sociales. Si pongo un personaje que no tiene WhatsApp, sí hay gente que no tiene, pero el personaje resultará extraño y muy poco creíble.

–El genero thriller tiene mucha aceptación, tanto por los lectores como por el número de autores que apuestan por él. ¿A qué cree que se debe esta preferencia, por qué atrae tanto?

–Mira que he visto reflexiones de psicólogos y de sociólogos en torno a las razones por las que lo siniestro nos atrae. y no tengo ni idea. Además, me da la impresión que nadie tiene muy clara la respuesta. Siempre pongo la comparación. Es muy difícil circular con el coche, pasar junto a un accidente, ver una camilla con un cadáver cubierto por una sábana y resistirse a mirar pese a que es una imagen muy desagradable. Esto sintetiza la atracción que sentimos por lo siniestro. De todo lo que he leído, la explicación que más me convence es que es un mecanismo evolutivo de autodefensa. Aprender y leer sobre crímenes nos muscula para protegernos de ellos. Me parece una explicación evolutiva bastante convincente. Si es correcto o no, no lo sé.

–La enfermedad también salta a las páginas de 'La oscuridad que habita en mí' cuando la protagonista tiene que acudir al psiquiatra.

–Cameron viene a Europa a cumplir sus sueños, entre ellos enamorarse. Se enamora de un chulazo latin lover y se casan. Pero surge el pasado oscuro de este chulazo emerge y la abandona por la vecina.La deja porque a ella se le despierta una esquizofrenia y la medicación la deforma. Ella se da cuenta de que se precipitó al elegirle va a un psiquiatra, Paul. En estas sesiones con el médico doy carne al personaje. Las reflexiones con el psiquiatra profundizan en la naturaleza humana. Ahí lo que decía sobre la necesidad de que los personajes inviten a pensar.

–¿Trabaja ya en alguna nueva novela?

–Sí, el cuarto thriller está ya muy avanzado. Se trata de un argumento muy valenciano. Transcurre todo en la ciudad de valencia.No quiero desvelar más, pero es muy valenciano, condición que, si la editorial lo acepta, ya se verá en el propio título, estará muy claro.