Lento avance en la reforma del Palau de la Música

En las inmediaciones del edificio ya se ven contenedores con escombros, que, siempre según fuentes sindicales, «pueden proceder del levantamiento del suelo de la sala Rodrigo» con el objetivo de trabajar en la instalación de los nuevos conductos del sistema de climatización. También se han colocado las primeras casetas de obra tras haber retirado el césped de los jardines de acceso, y se ha instalado el vallado de buena parte del edificio. Basta pasearse por la prolongación del Paseo de la Alameda para contemplar el escenario que rodea al auditorio que pronto, a final de junio, cumplirá tres años cerrado al público tras sufrir la caída de los techos de las salas Iturbi y Rodrigo.

Pero más allá de lo que puede observarse a simple vista, otras fuentes sindicales hablan de que lo que hasta ahora se ha visto son «preparativos». Añaden que «en el interior no se ven andamios», si bien puntualizan. También sostienen que al principio del proyecto se sabía que «lo primero que se haría sería retirar las butacas de las salas». Y esa tarea al parecer ya se ha llevado a cabo al menos en la sala Rodrigo -«las butacas ya estaban embaladas con plásticos»- sin que haya trascendido información oficial desde los responsables del auditorio.

La intervención comenzó a principios de abril y cuando se van a cumplir dos meses de la llegada de los albañiles y demás personal de la obra, ¿cómo van las obras? ¿En qué se trabaja en estos momentos? Ante estos interrogantes. Desde el Ayuntamiento de Valencia no ofrecen detalle del estado de las actuaciones. Aseguran que no disponen de «un inventario de intervenciones por día», algo que mantienen que sucede «en cualquier obra de envergadura». En cuanto a «avances significativos» advierten de que en la «medida en que los haya se irán comentando».

Se mantiene, pues, la espera para conocer qué se ha hecho ya y en qué se trabaja en estos momentos de cara a completar un proyecto que el día de su presentación se especificó que exigía unas obras que se extenderán al menos 15 meses. El periodo de ejecución convertía en previsible que el auditorio estuviera en condiciones de reabrir sus puertas y recuperar la actualidad en la temporada 2023-24.

Ante la necesidad de reformar el emblemático edificio cultural de la capital del Turia, se optó por una reforma integral del inmueble en lugar de acometer una rehabilitación escalonada que permitiera acometer las obras por fases (primero interviniendo en la sala Iturbi y luego la Rodrigo, o al revés). De esa manera se podría alternar el uso de los espacios principales. A los 20 días de decretarse el cierre indefinido del Palau de la Música, Glòria Tello y Vicent Ros anunciaron en una rueda de prensa que la reforma incluiría el cambio del sistema de climatización de las salas principales, del patio de butacas, de los paneles acústicos y de las plataformas elevadoras del escenario.

El Ayuntamiento priorizó el edificio a costa de sacrificar la programación (trasladándola a diversos escenarios, como Les Arts, la Rambleta, el Almudín y el Teatro Principal, entre otros), como consecuencia se ha registrado una fuga de abonados sin precedentes y malestar en la Orquesta de Valencia. Y esas circunstancias ya han pasado factura al auditorio con una pérdida de abonados que ha comportado el descenso de ingresos en los resultados del auditorio.