El Ministerio de Cultura concederá una ayuda de hasta 300.000 euros para las librerías valencianas afectadas por la DANA

El Consejo de Ministros Extraordinario, celebrado este lunes 11 de noviembre, ha aprobado el Real Decreto-ley por el que se adoptan medidas urgentes para el impulso del Plan de respuesta inmediata, reconstrucción y relanzamiento frente a los daños causados por la DANA, afectando gravemente a distintos municipios de la Comunitat Valenciana, entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre de 2024.

Este segundo paquete de medidas recoge algunas de las actuaciones incluidas en el Plan de Reconstrucción de la Cultura Valenciana, presentado el pasado jueves 7 de noviembre por el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, que se irá desarrollando durante los próximos meses. En aquel momento, Urtasun no ofreció datos de la cuantía de las ayudas ni del montante total con el que se iba a colaborar con las entidades culturales afectadas. Al final, como se ha conocido este lunes, la cantidad será de dos millones de euros en ayudas directas para los cines, librerías y entidades culturales que han tenido que cerrar sus puertas.

De esta forma, según se ha anunciado este lunes, jornada en la que, además, se conmemora el Día de las Librerías, en el sector del libro se concederán ayudas directas para titulares de librerías afectadas por la DANA con un importe máximo de 300.000 euros que irán destinadas a sufragar los gastos de funcionamiento y de fondos de libros. Adicionalmente, se prevé la concesión directa de subvenciones a entidades que forman parte del tejido asociativo del sector cultural, para la realización de actividades que contribuyan al diagnóstico de la dimensión de los daños producidos, apoyen a través de un asesoramiento técnico a las entidades culturales afectadas y ayuden, en último término, a la reconstrucción del sector.

Según aseguró el Ministerio de Cultura, se detectó que han sido once las librerías afectadas, de las cuales siete han sido completamente destruidas; y 32 las salas de cine afectadas, dos de las cuales han sido totalmente destruidas, mientras que el resto ha visto afectada su actividad.

En lo que se refiere al sector cinematográfico, el texto establece la concesión directa de ayudas a las salas de exhibición cinematográfica por un importe máximo de 300.000 para titulares de salas de exhibición cinematográfica ubicadas en localidades afectadas por la riada. La cuantía máxima de cada ayuda será de 12.000 euros para salas con una única pantalla, 25.000 euros para salas que cuenten con entre 2 y 8 pantallas, 35.000 euros para salas que cuenten con entre 9 y 13 pantallas y 59.000 euros para salas que cuenten con 14 o más pantallas.

Por lo que a la producción se refiere, se regula una ampliación de plazos para películas beneficiarias de ayudas en el período 2022 a 2024, cuyo rodaje esté previsto en localidades afectadas por la DANA. Se prevé una ampliación de los plazos para comunicar el inicio de rodaje y para solicitar la calificación y el certificado de nacionalidad que afectaría a los proyectos que hayan resultado beneficiarios de ayudas a la producción de largometrajes y de cortometrajes en los años 2022, 2023 y 2024.

Finalmente, se recoge la ampliación del plazo de ejecución de las ayudas del Bono Cultural Joven 2023. Desde el 29 de octubre hasta 31 de diciembre de 2024, se prevé que caduquen en los municipios principalmente afectados por la DANA 1.399 tarjetas del Bono Cultural Joven 2023. Considerando la magnitud de los daños ocasionados, que podrían condicionar el derecho a disfrutar y ejecutar las ayudas concedidas por parte de aquellas personas beneficiarias con residencia en los municipios afectados, resulta necesario ampliar el plazo de caducidad de aquellas tarjetas que finalice entre el 28 de octubre y el 31 de diciembre de 2024, ampliándolo hasta el 31 de marzo de 2025.

Estas nuevas medidas se suman al paquete urgente recogido en el Real Decreto-ley aprobado el pasado martes 5 de noviembre por el Consejo de Ministros, en el que se contemplan acciones de carácter específico para la cultura: la prestación por cese de actividad para los autónomos, en la que se ha tenido en cuenta la intermitencia propia de la especificidad de los trabajadores y trabajadoras de la cultura; y las ayudas a las entidades locales para la reconstrucción de sus infraestructuras que incluirán también los equipamientos culturales.

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