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Paco Roca excava en una fosa franquista

El dibujante valenciano y el periodista Rodrigo Terrasa publican 'El abismo del olvido', que sale hoy a la venta | «España es un país anormal en el sentido en el que no mirá atrás ni reflexiona sobre su pasado«, afirma el ilustrador y Premio Nacional de Cómic

Carmen Velasco

Valencia

Martes, 5 de diciembre 2023, 00:57

Excavar es, en la primera acepción de la RAE, quitar de una cosa sólida parte de su masa o grueso. Como sinónimos, el diccionario facilita: ... ahondar y profundizar, entre otros verbos. Y eso precisamente han hecho el dibujante Paco Roca y el periodista Rodrigo Terrasa en 'El abismo del olvido' (Astiberri): han quitado tierra sobre la fosa 126 del cementerio de Paterna; han desempolvado la historia de Pepica Celda, una octogenaria que logró dar con los huesos de su padre (fusilado por el franquismo) y la de Leoncio Badía, un sepulturero republicano que ayudó a las familias represaliadas cuando despedían a sus familiares; y han arrojado luz en la indignidad que supone para un país tener a 20.000 muertos localizados sin exhumar y otros 80.000 en paradero desconocido. Todo esto en viñetas, en un cómic enraizado en Valencia pero que aborda una cuestión universal: despedirse de los nuestros y hacer justicia con los que nos precedieron.

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'El abismo del olvido', que sale a la venta este 5 de diciembre, puede contribuir a cerrar heridas o favorecer una conciliación, la de la sociedad española, aún inconclusa. «España está llena de fosas comunes con mensajes en su interior esperando a que alguien los lea hoy», afirma el periodista valenciano. El cómic tiene una viñeta que refleja gráficamente lo que dice Terrasa: en la zona subterránea de una hamburguersería de comida rápida se oculta una fosa con cadáveres y se lee: «la democracia se cimentó sobre el olvido».

'El abismo del olvido' milita en el lado de la memoria porque a Roca le gusta «hacer cómics para reflexionar y comprender» y el último título no es la excepción. El germen de esta novela gráfica está en 2013, cuando Terrasa cuenta en un reportaje para 'El Mundo' la lucha de Pepica Celda por encontrar los restos de su padre en una fosa común del cementerio de Paterna, donde Leoncio Badía trabajó de sepulturero. Este republicano es una especie de Schindler de la época y así fue reflejado en 'Interviú' donde hace años se publicó la investigación periodística 'La lista de Leoncio'. Esta historia real tiene dos protagonistas que encajan a la perfección con los personajes que pueblan la obra de Paco Roca: «Gente que lucha contra el sistema o contra circunstancias más grandes que ella, pero que batalla por una cuestión de dignidad».

El cómic arranca con la historia de «una anciana que quiere recuperar los huesos de su padre y enterrarlos junto a los de su madre. Eso es muy humano, al margen de que un partido político ponga o quite subvenciones para las exhumaciones. Privar de esta ceremonia a los ciudadanos los deja en situación de desamparo y es algo muy universal», añade el autor de 'Regreso al edén'.

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La épica, otra marca de los cómic de Paco Roca, está presente en su última obra. La octogenaria Pepica, «que se prohibió a sí misma llorar tras la pérdida de su padre», según Roca, batalla contra la todopoderosa administración para lograr el permiso y la subvención para desenterrar a su padre mientras que el sepulturero Leoncio, cuyo minucioso trabajo permite ahora identificar los cadáveres, era un lector de filosofía, ateo y republicano en la España analfabeta y gris que vivió. «Son personajes en sí mismos, pero huimos de idealizarlos», añade el autor de 'Los surcos del azar'.

«España es un país anormal en el sentido en el que no mira atrás ni reflexiona sobre su pasado. Se nos ha hecho creer que lo extraño es mirar hacia atrás cuando todos los países, Francia, Alemania, Chile, Rusia o Estados Unidos, miran y hablan de su pasado», explica Roca. «La Transición fue modélica en muchos aspectos pero en la gestión de nuestra memoria no lo fue. Una vez acabó la dictadura, cambiamos el miedo por el silencio. Es un error que no se hable de esto. De hecho, estos días lo que pasa en Ferraz son como réplicas sísmicas de una herida mal cerrada», argumenta Terrasa, quien recuerda que el pacto PP y Vox que dio la Generalitat a Carlos Mazón incluía «la derogación de las normas que 'atacan la reconciliación en los asuntos históricos', como si hablar del pasado no fuera reconciliar, como si hubiera que meterlo en el cajón». «En el momento en el que PP se presentara en una exhumación y apoyara a las víctimas del franquismo, la izquierda perdería el poder político que tiene este tema. Así se demostraría que no se puede ser demócrata y blanquear el Franquismo», añade el Premio Nacional de Cómic. Esta cuestión, apunta Terrasa, «genera votos y apela a instintos de uno y otro lado».

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En una sociedad tan polarizada como la actual 'El abismo del olivdo' es «un buen ejemplo de hacia dónde podemos ir. Pensamos que una ideología nos hace mejor persona y no es así. Hay buenas personas de izquierda y buenas personas de derecha. Es el poder absoluto lo que conduce hacia lo salvaje», concluye Paco Roca.

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