El ministerio desconoce los planes de Cultura para la nueva etapa de Les Arts

Hace justo una semana, el ya exintendente del Palau de les Arts, Davide Livermore, presentó su dimisión como director artístico del coliseo valenciano. Ese hecho precipitó el anuncio de la conselleria de Cultura de que mañana mismo el patronato de Les Arts iba a aprobar los nuevos estatutos del auditorio. El departamento que dirige Vicent Marzà, en boca del secretario autonómico Albert Girona, aseguró que este era uno de los motivos por los que el 'regista' italiano había decidido abandonar su cargo. En ese momento, Girona confesó que se le iba a pedir al Ministerio de Cultura y al Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) que entraran a formar parte del patronato del auditorio valenciano.

Esta era una de las consecuencias de los nuevos cambios de estatutos, que van a traer consigo la intención de que el departamento en manos de Íñigo Méndez de Vigo tenga en cuenta la invitación para participar en este órgano. Y es que la conselleria ha exigido en numerosas ocasiones más implicación del Gobierno central. Económica y de presencia institucional. En el primer caso, Les Arts sólo recibe 600.000 euros del Gobierno central frente a los más de nueve millones del Teatro Real de Madrid y los más de siete para el Liceu de Barcelona.

Por todo ello, según ha podido saber LAS PROVINCIAS, la Generalitat Valenciana ya ha iniciado las primeras conversaciones para que el Ministerio se decida a formar parte del patronato. Han sido sólo unos contactos en los que se ha puesto sobre la mesa la intención de que tanto el Gobierno central como el INAEM entren en el ente. Pero ha sido un contacto tímido que, de momento, se está analizando y no hay ninguna postura tomada al respecto, indican estas mismas fuentes.

No ha habido información del futuro que afronta Les Arts. Una nueva etapa que únicamente no pasa por modificar los estatutos, sino también por cambiar el organigrama de Les Arts. Por una parte, Cultura acabará con el cargo del director económico-financiero para crear la figura del director gerente -que será seleccionado por el propio Gobierno valenciano-. Por otra, en 2018 sacará a concurso la dirección artística, que prevé tener nuevo representante a mitad de año.

Llama la atención que estos planes para el futuro más inmediato del coliseo no se hayan puesto en conocimiento del Ministerio. Sobre todo, en un momento en el que se le pide más implicación y el compromiso firme de formar parte de Les Arts. Se justifica, además, que el coliseo va a mirarse en el espejo del Liceu y el Real, unos auditorios que sí cuentan con el respaldo del Ministerio. Tampoco se les ha comunicado el vacío de poder que, desde hace una semana, reina en el coliseo valenciano.

Ante este panorama, la exconsellera de Cultura y diputada autonómica del PP María José Catalá ofreció ayer su ayuda y la de su partido para tratar de resolver «el follón» que a su juicio «se ha montado» en el Palau. Catalá afirmó que no puede perderse «la calidad, la oferta cultural y el prestigio internacional» que ha conseguido el Palau de Les Arts, y criticó la «torpeza sin precedentes y la cobardía» que, en su opinión, ha mostrado el Gobierno valenciano en esta cuestión.

La exconsellera de Cultura no es la única voz crítica que ha mostrado la incertidumbre ante el futuro de Les Arts y ha sido crítica con el silencio del conseller Marzà- El Comité de Empresa del auditorio volvió ayer a escenificar mediante un comunicado la «inquietud» por el nuevo modelo de gestión del coliseo valenciano, y trasladó su voluntad de ser «partícipe y contribuir en el desarrollo de este gran proyecto». Los empleados volvieron a insistir en «la incertidumbre» que ha generado en la plantilla los últimos acontecimientos como la dimisión de Livermore y el cambio de estatutos en la fundación del Palau de les Arts.