El curioso motivo por el que Bizarrap nunca se quita sus gafas y su gorra

Gonzalo Julián Conde es una persona común que puede caminar con normalidad por las calles de Ramos Mejía, su ciudad natal en Buenos Aires; aunque si se pone la gorra negra y las gafas oscuras, la cosa cambia, ya con ese look pasa a ser el artista más aclamado del momento: Bizarrap, quien actuará el próximo sábado 1 de julio en el Festival Big Sound de Valencia.

Mucha gente, especialmente los más jóvenes, se preguntan el por qué de esta misteriosa imagen del artista. Si bien lo del presentador de televisión, Risto Mejide, al que tampoco visualizamos sin sus gafas, se debe a un problema serio que tiene en sus ojos, lo de Bizarrap no tiene nada que ver con la salud visual del artsita.

La historia de las míticas gafas tamaño XXL y la gorra de Bizarrap es más bien una historia de timidez. «Tengo una personalidad bastante tranquila, yo soy bastante tímido (…). Entonces, anteojito, gorrita y todo el mundo me va a poder reconocer por más de que no sepa cómo es mi cara. Pero sigo siendo el mismo, no vendo un personaje», aseguraba el compositor argentino durante una entrevista.

Podríamos hablar de dos personalidades distintas, a lo Hannah Montanna, que el artista aprovecha para poder llevar una vida normal fuera de los escenarios y continuar siendo ese joven de 24 años que también busca poder disfrutar de su vida privada como cualquier otra persona de su edad.

Actualmente, Bizarrap es una especie de Rey Midas de la música, pues cada vez que se le asoman las propuestas para hacer una de sus Music Session -que ya va por la 56, con el último hit junto a Raw Alejandro- todo parece convertirse en oro para los y las artistas que son producidos por él, como la canción de Shakira que en apenas unas horas logró traspasar fronteras y ser la canción más escuchada del momento.

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