Fallece el músico valenciano Eduardo Bort

«Los músicos valencianos que empiezan tienen un futuro nefasto» decía el artista de la Comunitat Eduardo Bort en una de sus últimas entrevistas para este periódico. Lo hacía con motivo del concierto homenaje que iba a recibir en el teatro Principal de la capital del Turia y en el que se le rindió tributo por ser un exponente del rock sinfónico español. Bort, pese a llevar cuatro décadas sobre los escenarios, mostraba su preocupación por los compañeros de profesión que estaban intentando labrarse un hueco en la industria musical que ayer le despedía tras conocerse su fallecimiento. Con una carrera intermitente a lo largo de los últimos años, el que fuera también miembro de la banda sesentera Los Bodgies, moría a los 72 años tras sufrir una larga enfermedad. En su trayectoria, sobre todo, destaca el disco que lleva su nombre y que salió al mercado en 1975. «Ese trabajo se sigue vendiendo en 40 países. Hace tres años se subastó y se llegaron a pagar dos mil dólares por él», rememoraba el intérprete para este diario. Aquel proyecto que, según contaba, un directivo de una gran discográfica le había dicho que era el álbum que «mejor había envejecido», está considerado la obra cumbre del rock sinfónico en España. Un hito que traspasó fronteras y que coronó una década después con 'Silvia', el disco que lo situó al nivel de otros músicos como Carlos Santana o Pink Floyd.

«Pero a mí nunca me ha interesado el dinero», aseguraba el valenciano, que regresó a los escenarios el pasado 22 de marzo con esa actuación homenaje en la que, según confesó, lo que más ilusión le hacía era rodearse de los intérpretes de su tierra. No dudaba en recordar aspectos de una vida profesional que le llevó a recorrer el mundo. «He hecho giras por Sudamérica, por Japón... Aunque he de decir que, desde Buenos Aires a Moscú, siempre me he encontrado con músicos valencianos. Hemos estado desparramados por el planeta. Ni el ente público ni la gestión privada ha tenido interés en apoyar a los profesionales de la Comunitat», clamaba sin ningún tipo de reservas. Inseparable de su guitarra, Eduardo Bort deja un legado esencial para el rock.