Los 50 años de Bounty El Saler: Desde el Rey Felipe VI hasta Martes y Trece

Por su pista de baile han pasado ya miles y miles de valencianos y también multitud de rostros conocidos del panorama nacional. Y es que, Bounty Saler ha sido y sigue siendo todo un referente en la noche valenciana. Desde que su fundador Chimo Prat y su socio Pepe Pitarch decidieran embarcarse en este nuevo negocio -allá por el año 1968 y después del «éxito» cosechado con Bounty Valencia- la discoteca no ha dejado de crecer y evolucionar.

«Chimo, que era un genio para los negocios, vio que Valencia tenía un gran potencial y al mismo tiempo una demanda de ocio muy importante. Se lanzaron a la aventura y la jugada fue redonda, ya que ahí iniciaron una trayectoria hasta el día de hoy, donde las salas más importantes de la ciudad fueron suyas», destaca Samantha Prat, que junto a su hermano Chano dirige en la actualidad la discoteca. «Tampoco quiero olvidarme de Juan Martín, que fue durante más de 30 años el gerente y máximo responsable de la sala, después de los propietarios. Gracias a él también estamos aquí», puntualiza.

Ahora, 50 años después de aquella puesta en marcha, Bounty Saler quiere celebrar con todos los valencianos su medio siglo de vida. Y lo hará el próximo sábado 20 de octubre por medio de una fiesta «muy especial» porque «¡50 años no se cumplen todos los días!», dice Prat.

Aunque no ha querido desvelar del todo cuáles son las sorpresas que hay preparadas, asegura que han invitado a políticos y empresarios «para que compartan con nosotros sus recuerdos» y añade que la noche contará con tres dj. «que llevan desde hace meses trabajando para recopilar grandes temas de ayer, hoy y siempre».

En la pista de baile de Bounty Saler, que se inauguró con el nombre de 'El Quijote' y así se continuó llamando hasta los 80, no sólo se han divertido valencianos. La discoteca ha tenido el honor de recibir a muchos famosos de la talla de los humoristas Tip y Coll y Martes y Trece, y cantantes como Miguel Bosé, Alejandro Sanz y el grupo Mecano. «Sería interminable enumerar todas las personalidades tanto del deporte, del mundo del arte, política o de la llamada 'jet set' que han pasado por aquí», dice Prat.

Pero si tuviera que destacar una de ellas, Samantha se queda con la más «especial»: la visita, a mediados de los años 80, del Rey Felipe VI, por aquel entonces Príncipe de Asturias. «Vino un par de noches con sus compañeros de regatas», recuerda con cariño. «Solo bebía TriNaranjus de naranja y venía con tres o cuatro de la tripulación. Sólo lo acompañaban dos escoltas, que se quedaban en un lado», desvela no sin antes añadir que «jamás nos dejó que le invitaramos, siempre sacaba dinero de su bolsillo».