La Habitación Roja: «Los políticos no van tots a una veu«

Luego vino la gestión política. «Las cosas no se han hecho bien», afirma. «El hecho de que las administraciones se echen los trastos y que no haya unión entre los partidos políticos son los trastos crea desasosiego», argumenta. ¿No van como dice el himno regional «tots a una veu»? «No, no van y eso crea zozobra. A mí, cuando vi la primera comparecencia con Sánchez y Mazón me gustó pero fue un espejismo de 24 horas. No duró, fue una gran decepción y eso provoca dolor. Si las administraciones fueran a uno, la gente se sentiría más arropada. Quiero pensar que los políticos están al servicio de la ciudadanía y que las ayudas anunciadas llegarán. Sé que es difícil consolar con palabras y números a la gente que ha perdido familiares y se ha quedado sin nada... Es devastador. Sus testimonios, que están recogidos en el sumario de la causa de Catarroja, son conmovedores, llegan al corazón», argumenta.

Martí continúa reflexionando sobre todo lo sucedido. «No me gustaría estar en la piel de los políticos, ni de Mazón, porque esto le va a perseguir siempre. Si eres un cargo político tienes una responsabilidad detrás. Salvando las distancias, yo he sido enfermero y, en algunos trabajos, has de estas muy centrado porque las vidas depende de ti. A determinados cargos hay que acceder por valía, no por afinidad política«, explica Martí, quien considera que los políticos no parecen estar al lado de las víctimas. »No sé si es congénito al pueblo español, pero cada vez que pasa algo no vamos todos a una y es un poco el sálvese quien pueda. Esa percepción, como ciudadano, es horrible«.

La dana afectó a la bada. Los padres de Martí viven en la zona entre la Eliana y Riba-roja. La familia de Mark, el bajista, en Aldaia y han perdido dos coches, la mujer de José, el batería, trabaja en una oficina bancaria en Aldaia. LHR está vinculada a la zona cero, desde ensayos en locales de Massanassa, trabajos temporales en el Continente (hoy, Carrefour) de Alfafar o entrenamientos cuando eran más jóvenes en campos de fútbol municipales. En Torrent se celebrará el Germanor Fest de Amstel, el próximo 8 de marzo, donde actuarán La Habitación Roja, Varry Brava, la Casa Azul. Es una cita solidaria por los afectados de la dana.

La 'germanor' es de las pocas cosas buenas que deja la dana. «Una catástrofe de estas características despierta la solidaridad. Todo el mundo ha intentado ayudar en la medida de sus posibilidades. Los voluntarios merecen el aplauso pero la logística, la organización, los protocolos dependen del Estado y necesitamos administraciones fuertes para darnos servicios. La forma de salvar a los que te rodean es pagar impuestos, respetar las leyes y ser tolerante con el prójimo», sostiene.

«Con este tipo de catástrofes, los símbolos se resignifican y sirven para unir, no para separar; cobran otro sentido», argumenta respecto a la resignificación del himno regional, el mismo que tarareaban los voluntarios en las calles de los pueblos afectados por la zona y suena en estadios y auditorios de toda España. «Esas cosas son emocionantes», remarca. E insiste: «Ante la adversidad, la gente tiende a unirse. En los peores momentos surge lo mejor de cada cual. Yo creo en la gente buena». En este punto, Martí deja lo local y focaliza en el contexto universal, donde detecta un «resurgir del mal», un empoderamiento de Donald Trump y Javier Milei. «Esa cultura del odio se ha de confrontar con la solidaridad», detalla.

El cantante de La Habitación Roja defiende el «idealismo inherente a la juventud» y desea que «no lo pierda en aras de un materialismo». «Cuando se tienen ilusiones, se quiere cambiar el mundo. O intentarlo», asegura. A los conciertos de LHR van jóvenes y no tanto, apostilla. «Una de las mejores cosas del grupo es nuestro público, que es súperbuena gente. Jamás he visto una pelea o una discusión en nuestros conciertos. Se genera un ambiente como de celebración de la vida, a pesar de que a veces las canciones tienen un poso melancólico, triste o hablan de situaciones complicadas», añade.

En tres décadas el panorama musical ha cambiado notablemente. La Habitación Roja empezó en analógico, ahora trabaja en digital y .en breve llegará la inteligencia artificial. «Yo no tengo nostalgia de los tiempos pasados», sentencia. «El músico de ahora ha de ser su propio publicista y quizás antes se estaba más centrado en la música», sentencia. En 30 años de vida, «la esencia de la banda está intacta: mantiene el gusto por las melodías y por las canciones bonitas».

Durante todos estos años, las familias de los miembros de La Habitación Roja han sido un puntal. «En los inicios del grupo pensaban que LHR era un capricho de juventud. Con los años se tomaron en serio que nosotros nos tomáramos en serio la música», recuerda. Las madres de Mark Greenwood (bajo), José Marco (batería), Pau Roca (guitarra) y Jorge Martí (voz y guitarra) protagonizan la portada de 'Crear', el último disco de la banda. Se llaman Mari, Maruja, Isa y Lola. Ellas son las madres de los músicos que están detrás de canciones tan populares como 'Indestructibles' y 'Ayer'.