Sidonie, los chicos de 'El peor grupo del mundo', encienden la fiesta indie y rock de Valencia

La Marina de Valencia, con asistencia de cientos de amantes de los grupos de indie y rock que por la mañana ya han empezado a subirse al escenario, ha sido una gran fiesta.

A lo largo de la tarde y la noche, la afición ha multiplicado su presencia para escuchar y bailar con Obtuso, Ginebras, Fat Gordon, Víctor Ollé y Sidonie, grupo que a las 21,35 horas ha disparado la temperatura con los personalísimos ritmos de la formación catalana nacida en 1997.

La sucesión de temas ha dado prueba de la fidelidad de una parroquia que coreaba entregada el tema 'Ámbar' y tarareaba esos versos que cantan «me tienes fas fas fas fas fascinado…» en la canción 'Fascinados'. Y después más música y calor del público. Palmas y movimiento mientras los catalanes cantaban 'Soy el peor grupo del mundo' para dar paso a 'Por ti', al rítmico 'Me gustas todo el rato', Verano del amor', 'Maravilloso', 'El incendio' y esas 'Carreteras infinitas' por las que ya ha discurrido la máxima entrega de la afición.

Ha quedado claro que con Sidonie se ha disparado el termómetro, también se ha comprobado que las artistas de Ginebra ya habían empujado el ascenso de la temperatura. Ellas han empezado a las 19, 40 horas a animar el aforo hasta llevarlo a bailar y bailar sus temas. Han abierto el fuego de la diversión a todas luces. Alto voltaje a medida que sonaban 'Desastre de persona' y ese tema de contenido urbano para contar una historia de amor: 'En el metro yo me enamoré'. Y han seguido con « nuestra canción favorita», ha confesado la vocalista, para presentar 'Ansiedad'. Los grupos Obtuso y Depresión Sonora al cierre de esta edición se preparaban para tomar el escenario.

El Love to rock es una propuesta que no ha perdido de vista al público familiar, disponiendo de una zona de actividades para niños llamada Love to Kids. La oferta se completa con Love to Food, que convierte al festival en lugar gastronómico donde poder degustar platos sencillos realizados de mano de los primeros cocineros.