Secciones
Servicios
Destacamos
N. C./ AGENCIAS
VALENCIA.
Sábado, 10 de noviembre 2018, 01:16
Las reacciones por la cancelación de la exhibición de la obra en el Olympia seguían ayer suscitando reacciones después de que Dani Mateo aceptara la invitación formal del alcalde de Valencia, Joan Ribó, de actuar en el Palau de la Música.
Tras conocerse lo sucedido, numerosos políticos del PSPV y de Compromís salieron en tromba a defender al cómico y ofrecieron espacios públicos de la ciudad para que se viera el montaje. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, el conseller de Cultura, Vicent Marzà, o la teniente de alcalde del Ayuntamiento de la capital, Sandra Gómez, -quien llegó a sugerir que la obra recalara en el Palacio de Congresos- mostraron su disconformidad.
Ayer mismo, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, manifestó que «la agenda cultural no puede depender de amenazas de la extrema derecha», y que un Estado de derecho «no puede tolerar» que esos grupos apliquen «la censura» a nadie, afirmó en alusión a la concentración que iba a realizar España 2000 el próximo 23 de noviembre frente al teatro de la calle San Vicente.
Por su parte, el portavoz del grupo popular en el Ayuntamiento de Valencia, Eusebio Monzó, pidió a Ribó y a Gómez que «se pronuncien y digan si les parece bien la actuación en la que, con la falsa excusa del humor, se suena los mocos en la bandera de España». Monzó defendió la libertad de expresión «como un pilar fundamental del estado de derecho», pero consideró que en una sociedad democrática «no se puede faltar al respeto a los símbolos en los que la gran mayoría de españoles nos sentimos representados».
Puig insistió que «el derecho de manifestar una crítica no puede ser atacar la libertad de expresión» y el primer edil del Consistorio incidió en que mientras él sea alcalde «siempre garantizará los derechos y libertades; en definitiva, la democracia». El delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Fulgencio, mostró un «respeto absoluto y total a las ideas y a las formas de manifestarlas dentro de los límites legales que el Estado de Derecho nos impone a todos». Finalmente, el poeta Josep Piera, el actor Pepe Viyuela, el músico Vicent Torrent y el pintor Artur Heras rompieron una lanza en favor del humorista y lamentaron que «estamos entrando en una época inquisitorial».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.