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'Fes Cultura' ya no es 'Fes Cultura'. Ahora es 'Cultura para la recuperación'. Es el nuevo plan que el conseller del ramo, Vicent Marzà, presentó ayer a bombo y platillo ante diversos representantes del sector para sentar las bases de la gestión artística de los dos próximos años. Es su segunda hoja de ruta, que llega tras la anterior, la que debía implementarse entre 2016 y 2020, y que sin embargo no cumplió con los objetivos previstos en el plan.
Cuando se presentó ‘Fes Cultura’, la conselleria iba a destinar 500 millones de euros durante cuatro años al sector. Se iban a crear entre 8.000 y 10.000 puestos de trabajo en la industria. Además, la internacionalización era un pilar básico del proyecto. Como la puesta en marcha de una Ley de Mecenazgo efectiva. Demasiados objetivos que apenas se cumplieron. Y no porque llegara la pandemia, que golpeó a todos los sectores de la cultura en marzo de 2020, –justo el año en el que el plan debía haber recogido ya los frutos de la implantación de esas políticas–. No fue así, así que la conselleria se ha sacado de la manga otra nueva hoja de ruta.
Esta vez, es menos ambiciosa. No tiene un objetivo presupuestario concreto y claro (como sí se tenía en 2016). Es más, como defienden desde el departamento de Marzà, dependerá de lo destinado a Cultura cada año en los presupuestos de la Generalitat. Aunque se espera que el próximo ejercicio aumenten, tampoco hay cifra concreta. Lo que sí promete ‘Cultura para la recuperación’, título que da nombre a las ocho líneas de actuación del plan es la creación de mil puestos de trabajo relacionados con la industria cultural cada año. También, el compromiso de destinar el 35% del montante global que la conselleria destina a este ámbito a ayudas a todos los sectores.
El cambio en lo relacionado con las subvenciones fue una de las reclamaciones que este mismo verano realizaron desde el ámbito de las artes escénicas valencianas. Diez asociaciones pidieron un cambio en la resolución de las ayudas, que se modificaran las bases. Pero también tildaron del anterior plan, ‘Fes Cultura’, de «papel mojado». Su pelea ha tenido recompensa y en ‘Cultura para la recuperación’ se recogen aspectos como la creación de tres tipos de convocatorias (a proyectos, a procesos de creación y subvenciones plurianuales al mantenimiento de infraestructuras culturales) o la posibilidad de que las reciban consorcios de agentes diversos que se una para articular proyectos, entre otras.
El plan, que ya entra en funcionamiento, contempla otros aspectos como la creación del Laboratorio Valenciano de Cooperación Cultural (LaVaCC), «una unidad encargada de coordinar toda la política cultural de la Generalitat», anunció ayer Marzà, quien también contó que nace el Plan de Fomento de la Formación a Agentes Culturales públicos y Privados. Asimismo, se impulsa la creación de la Plataforma para la Internacionalización «para el acompañamiento a los sectores en la conexión con las redes europeas e internacionales», algo que ya recogía ‘Fes Cultura’ y que no se llevó a cabo de manera efectiva.
¿Se quedará esta ruta en papel mojado, como denunciaron los responsables de las artes escénicas hace unos meses en referencia al plan estrella de la pasada legislatura? Cultura tiene dos años para demostrar su eficacia, sobre todo en tiempos de recuperación como los actuales.
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