La sala Alfonso el Magnánimo retoma la actividad tras su clausura por la caída de cristales

La sala Alfonso el Magnánimo del Centro Cultural La Beneficencia retoma la programación prevista para este fin de semana tras la cancelación de las actividades por los desperfectos sufridos en la cúpula del espacio. El área de Cultura de la Diputación confirmó ayer la vuelta a la normalidad y desde Patrimonio aclararon que se ha instalado una malla que cubre la cúpula para evitar daños y garantizar la seguridad.

Esta tarde ya se celebrará en este espacio la gala de entrega de los premios taurinos que concede la Diputación. Mañana actuará la Coral Scholapiarum Cantores y el domingo, el Orfeón Manuel Palau. Las dos audiciones no forman parte de la programación propia del espacio cultural, sino que se enmarcan en la línea de cesión de espacios.

La actividad se paralizó por indicación de los técnicos tras observarse el pasado día 13 la rotura de cristales y su caída a la sala como consecuencia de los impactos de las palomas en la vidriera que cubre la cúpula, como explicaron desde Patrimonio.

El informe de los especialistas indicaba la instalación de un andamio y de una malla de protección. Desde Patrimonio aseguraron ayer que ya se ha acometido la «intervención preventiva».

La red protectora se ha colocado en la parte exterior, cubriendo el lucernario. Desde el interior de la sala se pueden observar los huecos que han dejado en la vidriera los cristales desprendidos.

El área de Cultura de la Diputación anunció a principios de esta semana que esperaría a disponer de un informe técnico que garantizara la seguridad tras la adopción de las medidas preventivas para retomar la actividad. Ayer confirmaron la recepción de ese documento y, por tanto, la recuperación de las actividades previstas, decisión que se dio a conocer a través de la página del Centro Cultural La Beneficencia en internet.

Ahora se ha acometido la reparación urgente que permite seguir adelante con la actividad, pero queda pendiente la restauración integral de la cúpula. Esta actuación se ha postergado a 2019. Desde Patrimonio aseguraron que no podían confirmar cuándo se llevarán a cabo los trabajos.

A la vuelta de las vacaciones navideñas se solicitarán al Ayuntamiento y a la Generalitat los permisos pertinentes para poder actuar sobre un edificio que cuenta con la catalogación de Bien de Interés Cultural. De la obtención de estas licencias dependerá la fecha en la que se puedan acometer las obras. La institución provincial destinará 40.000 euros (más IVA) a la reparación del lucernario.

Lo sucedido esta semana en La Beneficencia ha venido a ampliar los desperfectos localizados en distintos espacios culturales de la ciudad como consecuencia de falta de mantenimiento, dejadez en la conservación, fallos en las obras o daños por las lluvias.

El teatro Principal se encuentra desde junio pasado cubierto por una malla hasta que se reparen los desprendimientos en la fachada lateral, el Palau de la Música tuvo que adoptar medidas urgentes ante la caída el mes pasado de varios trozos del techo de la sala Iturbi. El Archivo del Reino también está pendiente de reparar algunos desperfectos en la fachada. El museo de la Almoina ha sido pasto de las humedades y la disgregación de materiales hasta el punto de que se han tenido que retirar varias de las piezas que se exponen.