El teatro valenciano gana terreno en los Max

No son los mejores tiempos para las artes escénicas de la Comunitat. Teatros cerrados, compañías paradas, montajes sin terminar... y en medio de esta crisis, al menos, llega un balón de oxígeno en forma de nominación a los premios Max. Hasta nueve profesionales y espectáculos de la región han pasado el último corte y se han convertido en finalistas a los prestigiosos galardones del teatro. De esta forma, la industria escénica valenciana gana terreno en los Max, que este año se entregarán el 7 de septiembre en Málaga tras cancelarse la ceremonia prevista para el 29 de junio. Tres nominaciones más que en la pasada edición y que alcanzan los nueve reconocimientos a las producciones de la región. Un hecho que marca una senda de esperanza en la que 'Dinamarca', el espectáculo de los hermanos Josep Lluís y Rodolf Sirera que les permite competir en la categoría de mejor autoría teatral. Esta obra, producción del Institut Valencià de Cultura, cerraba la trilogía 'Europa en guerra' de ambos dramaturgos y se estrenó en el Rialto después del fallecimiento de Josep Lluís. 'Dinamarca' también le vale a la actriz valenciana Rebeca Valls la posibilidad de alzarse con la 'manzana' por su interpretación. No lo tendrá fácil ya que compite con Verónica Forqué ('Las cosas que sé que son verdad') e Irene Escolar ('Hermanas. (Bárbara e Irene)').

En este sentido, el teatro documento de la compañía La Catrina le ha valido también dos nominaciones. La obra, ‘Homenaje a una desconocida’, que nació de una residencia en Carme Teatre, pugna en la modalidad de montaje revelación y pone el foco en sus dos creadoras, Desirée Belmonte y Cristina Correa, que compiten en autoría revelación.

Por su parte, y aunque era una de las creaciones valencianas con mayor número de prenominaciones, ‘Animal de séquia’, de la alcoyana Sol Picó sólo se ha conformado con la nominación para Jesús Salvador ‘Chapi’, que se cuela en la categoría de mejor composición de espectáculo musical. Asimismo, otra de las producciones que sólo se queda con una mención es ‘Valenciana. La realidad no es suficiente’, el espectáculo que aunaba la Valencia de los 90 con la corrupción, la ruta del bakalao y los crímenes de Alcàsser. Esta coproducción, que se estrenó en el teatro Principal, le ha dado al dramaturgo Jordi Casanovas la oportunidad de lograr el Max a mejor dirección de escena (otro de sus montajes, ‘Jauría’ opta a mejor espectáculo). En lo que a danza se refiere, la bailarina valenciana Paloma Calderón –que ha formado parte de muchas de las propuestas de Ananda Dansa– opta a mejor bailarina por su interpretación en ‘Cortejo’. Además, la compañía de la valenciana Mar Gómez, que suele desarrollar su trabajo fuera de la Comunitat, ha sido nominada a espectáculo de calle por ‘Slapstick’. Finalmente, ‘Zapatos nuevos’, de Teatre de l’home dibuixat ha conseguido pelear por el Max en la categoría de montaje infantil y juvenil.

Todos ellos viajarán a Málaga, si la actual crisis sanitaria lo permite, para pugnar por un premio, impulsado por la Fundación SGAE, que este año tiene de favorita a la obra ‘Shock (El Cóndor y el Puma)’, de Andrés Lima, con cuatro nominaciones. Le siguen ‘Com els Grecs’, de Josep María Mestres, con tres, misma cifra de la ópera ‘Je suis narcissiste’ y del espectáculo de danza ‘Anhelo’.