'Adán y Eva': Una noche de sexo y una decisión equivocada marcan la séptima entrega del reality

La séptima entrega de 'Adán y Eva' estuvo cargada de sexo, novedades y muchas sorpresas inesperadas. Rachel fue la Eva del programa de ayer, y tuvo que elegir entre un Adán escultural llamado Paco y Daniel Folla, otro mucho más romántico y natural.

El primero en llegar a la isla para conquistar el corazón de la exótica canaria fue Daniel. La compenetración entre ellos era evidente y ya en la primera noche se entregaron a la pasión en la cabaña de la playa. Pero el programa no dejó que la pareja disfrutase demasiado de su noche de amor y con el amanecer un nuevo habitante llegó a la isla: Paco, un atractivo y exhuberante miembro de la Policía Nacional.

Los encantos y el increíble atractivo físico del joven enamoraron a Rachel, y la joven no dudó ni un segundo en dejarse cautivar. Pero cuando todo parecía empezar a tomar forma una carta inesperada llegó a las manos de la canaria. En ella el programa le informaba de que uno de sus dos pretendientes estaba mintiéndole y su relación previa se había terminado por una infidelidad. Rachel interrogó a sus dos 'Adanes', pero ambos negaron los hechos.

Cuando llegó el momento de la elección, Rachel se decantó por Paco. Sin embargo, poco después la verdad salió a la luz y el policía reconoció que había sido infiel a su expareja. Al saber la verdad Rachel rechazó cualquier posibilidad de tener una relación con él. Y cuando la canaria creía que su aventura en 'Adán y Eva' había terminado y que se volvía sola a casa el programa le dio una grata sorpresa y Daniel volvió a entrar en escena para abrazar a su 'Eva' y postularse como el hombre perfecto para la joven.