Antonio Molero, el actor que encarnó a Fiti y al que dieron por muerto

Antonio Molero (54 años) es, seguramente, uno de los actores más queridos de la ficción española gracias a sus míticos papeles en series tan populares como 'Médico de familia', dónde interpretó a Pioli. Pero, sin lugar a dudas, su enarnación más popular fue la de Fiti en 'Los Serrano', el amigo inseparable de Diego.

La ficción se estrenó en 2003 y duró un total de 8 temporadas. Lo suficiente para ser una de las más queridas en la historia de la televisión en España. A nivel internacional fue emitida y adaptada en Serbia, México, Grecia, Bosnia y Heregovina, Portugal, Italia e incluso la NBC compró los derechos.

Debido a esta fama en alguna ocasión Molero ha reconocido que le paraban en la calle, le pedían fotografías, no podía coger el transporte público y dos décadas después la situación es aún peor porque como la serie la siguen emitiendo en bucle la gente le graba con el móvil sin pedirle permiso en restaurantes, en el tren... En definitiva, odia la mala educación y agradece a los que se acercan con cariño.

Según explica él mismo, es un hombre tranquilo al que le encanta dibujar porque le aporta paz, evita siempre que puede las multitudes y disfruta de las fiestas de su pueblo con los amigos de siempre. Un toledano de lo más sencillo.

En lo referente a su vida privada, desde 2005 comparte su corazón con su mánager, Katia Bárbera, tiene dos hijos, Alejandro (20) y Jimena (12), y en casa quien cocina mejor es él. Nunca se le han caído los anillos por ir a comprar al supermercado, esconderse entre platos y cacerolas o ir a buscar a sus hijos al colegio.

Ahora se dedica a disfrutar de su otra gran pasión: el teatro. Ha protagonizado varias obras como 'Una terapia integral'.

Uno de los peores momentos que le ha ocasionado la fama ocurrió cuando un portal de internet publicó la noticia de su fallecimiento. Aquello e difundió rápidamente. Él asegura, en una entrevista para El Mundo, que se enteró en la pausa del rodaje de una serie. Algunos amigos le llamaban llorando.