'La Promesa' pone fin al suspense y confirma la muerte de Jana

Hace unos días se venía especualando con la muerte de uno de los protagonistas de 'La Promesa'. Fue Televisión Española quien hizo correr la voz para que la audiencia permaneciera enganchada a la triple sesión que ha emitido este pasado miércoles, 19 de marzo. Los peores presagios se han cumplido y la fallecida es un personaje muy querido por el público. Se trata Jana. La sirvienta no ha sobrevivido al intento de asesinato. La señora Expósito se mantenía con vida hasta que, de la noche a la mañana, tanto ella como el bebé que esperaba junto a Manuel, han dejado de respirar.

Ya se lo advirtió en su momento María Fernández, hablando sobre la historia real de su madre Dolores, y su affaire con Alonso: «Esa historia acabó peor que mal, y como no hagas nada para remediarlo, puedes acabar como tu madre».

Sin embargo, la joven no cesó en su búsqueda de la verdad sobre lo que ocurrió con su madre y se enfrentó a Cruz (Eva Martín). Sin embargo, aún están por esclarecer varios hechos del asunto y todo podría desvelarse entre el jueves y el viernes; cuándo también habrá doble emisión por la tarde.

Fue Manuel el que encontró el cuerpo de su esposa tirado en el suelo junto a un gran charco de sangre. Tras escuchar los gritos del heredero del marquesado, Curro acudió en su ayuda. Él tampoco podía creer lo que estaba viendo, pero tenían que actuar rápido.

El doctor Gamarra y el sargento Burdina no tardaron en llegar. El primero de ellos, dejó a la familia más tranquila tras el primer diagnóstico: tanto Jana como el bebé se mantenían con vida. Ahora, la recién casada estaba luchando por su vida y la de su hijo, pero parecía que iban a salir adelante.

Burdina, por su parte, no tardó en iniciar una investigación exhaustiva en el palacio para encontrar al culpable. Un botón que Manuel encontró en las manos de Jana ha sido clave para el caso. El sargento descubrió a la propietaria de ese objeto: la marquesa de Luján.

Manuel no se separaba ni un segundo de su esposa y mantenía – al igual que todo el palacio – la esperanza de que, tanto ella como el bebé, iban a sobrevivir. Sin embargo, no ha sido así. La ficción nos ha regalado un momento increíblemente emotivo en el que Manuel sueña con que se despide de Jana. Durante esta secuencia, se reproducen las mismas palabras que se dijeron los recién casados la primera vez que se vieron – en aquel ya lejano primer capítulo de la ficción -

Cuando Manuel ha despertado de ese emotivo sueño, ha sentido que Jana se marchaba, que dejaba de respirar. Y no solo ella, sino también el bebé que estaban esperando con tanta ilusión y que sería el heredero del marquesado de Luján.

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