Tamara Falcó protagoniza la prueba más peligrosa de la historia de Got Talent: «No quiero pensar cómo lo ha pasado su madre»

«¿Esto lo has visto en más temporadas? ¿Le damos ya al botón rojo?» Tamara Falcó vivió como protagonista, encima del escenario, uno de los retos más impactante de Got Talent. Krystal Kurio, fakir de profesión, eligió a la hija de Isabel Preysler como colaboradora para realizar la que ha sido bautizada como «la actuación más peligrosa» en la historia del programa.

«Lo he pasado mal, y no quiero pensar cómo lo ha pasado la madre de esta señora», reflexionaba Tamara después de ayudar a la artista a sacarse un clavo de la cabeza, introducir un sable en su cuerpo por la boca o romper con un martillo. un bloque de cemento con Krystal tumbada sobre una cama de clavos.

«Me ha encantado, me ha parecido alucinante. Yo como espectadora pensaba que era mentira, que las espadas estaban hechas de goma espuma, y la verdad es que ha sido alucinante no, lo siguiente», explicaba Falcó al finalizar una actuación para la que todos los miembros del jurado salvo Risto dieron un sí rotundo.

«Yo soy la nueva, no creo que esté capacitada.¿ Le quedará bien?», dudaba Tamara antes de saber a qué se iba a someter. Krystal Kurio llegaba desde Los Ángeles, en Estados Unidos con un número que hizo girar la cara a más de un jurado y a numerosas personas del público.

Tamara, bastante asustada, subía al escenario en compañía de Santi y de Krystal y comprobaba que la clase que estaba a punto de recibir para asombro del público y de sus compañeros no era de otra cosa que de... ¡faquirismo! Y es que esta estadounidense de 35 años ha hecho de esta peligrosa disciplina su forma de vida: «La primera lección que hoy vas a recibir es una a la que llamamos 'la insensatez humana», le explicaba Krystal a la influencer.

Con la ayuda de un martillo, la concursante clavaba a través de uno de sus orificios nasales un enorme clavo que Tamara debía después sacar con la parte trasera de la herramienta. Paula Echevarría, que no podía creer lo que estaba viendo, pulsaba horrorizada su botón rojo para frenar la que sin duda ha sido la actuación más peligrosa de las diez ediciones de 'Got talent España'.

Pero la actuación de Krystal no había hecho más que empezar... La concursante sacaba entonces de su maleta una serie de espadas y, tras humedecerlas con saliva, comenzaba a introducirlas en su boca: «Esto es realmente peligroso, os voy a mostrar que el 'tragasables' no tiene truco y que realmente los faquires introducimos espadas en nuestro esófago». «Yo no sé si sé sacar tres espadas a la vez», dudaba Tamara.

Para terror de los jueces y del público, Krystal introducía hasta tres espadas en su cuerpo que instantes después sacaba impregnadas de lo que parecía ser mucosa. Segundos después, la faquir se tumbaba sobre «su cama de clavos» y le pedía a Santi que hiciera algo por ella: «Colócame este bloque de cemento sobre el abdomen, Santi, y tú Tamara me golpearás con este mazo».

La jueza, que estaba aterrada pero a la vez disfrutando de la actuación, accedía y cogía el mazo con ambas manos para golpear el bloque de cemento que se partía en dos sobre su cuerpo.

La actuación de Krystal no dejaba a nadie indiferente. Tras estos arriesgadísimos números, llegaba el turno de las valoraciones del jurado, quienes aún se recuperaban de lo que acababan de vivir. Paula, pese a haber pulsado su botón rojo, le reconocía a la estadounidense su talento y le daba su sí.

Florentino y Tamara, que recibía de la faquir un diploma por su papel como ayudante, también apoyaban el número de la concursante y votaban 'sí' para volver a ver a Krystal sobre el escenario. Risto ponía la nota discordante y, pese a haber disfrutado del número, decidía darle un no: «Creo que puedes hacer cosas mucho más peligrosas, para mí hoy es un no». Krystal, que volverá a actuar en la semifinal del talent, hacía una promesa: «Traeré algo que los jueces no han visto en su vida».

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