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Marcos Sánchez
Valencia
Miércoles, 5 de marzo 2025, 17:53
Quique Llopis es una de las piezas clave de la selección española en el Campeonato de Europa de pista cubierta, que se disputa este fin de semana, de jueves a domingo, en el Omnisport Stadium de Apeldoorn, una ciudad en el centro de los Países Bajos. Acompañado por su entrenador, Toni Puig, el valenciano afronta su cuarto Europeo 'indoor' con tan solo 24 años. Una barbaridad.
Su última participación, en Estambul 2023, le dejó un mal recuerdo. Sufrió una aparatosa caída en la final de los 60 metros vallas y permaneció varios minutos tendido en la pista antes de ser trasladado a un hospital, donde pasó 24 horas en observación. Sin embargo, aquella mala experiencia lo convirtió en un atleta aún más fuerte. Con la ayuda de la psicóloga Davinia Albinyana y una preparación meticulosa, Llopis se consolidó como uno de los mejores vallistas del mundo.
Su gran confirmación llegó en 2024, cuando ganó la medalla de plata en el Europeo al aire libre de Roma y consiguió un increíble cuarto puesto en la final olímpica de los 110 metros vallas. Ahora, apenas unos meses después de su actuación en París, se presenta como uno de los favoritos al podio e incluso al título. Tras proclamarse campeón de España en Madrid hace dos semanas, dejó clara su ambición: «No me conformo con un bronce, voy a por el oro», aseguró. Posteriormente, en el World Indoor Tour de Madrid, igualó dos veces el récord de España (7.48), que comparte con Orlando Ortega desde el año pasado.
Llopis llega al Europeo con la cuarta mejor marca del ranking del año, en el que solo el polaco Jakub Szymanski ha bajado de 7.40 (7.38). También lo superan el suizo Jason Joseph (7.45) y el francés Wilhem Belocian (7.46). Su debut será este jueves en las series (21:20 horas), y el viernes se disputarán las semifinales y la final (21:53).
Otro debutante con la selección española será Lester Lescay, un atleta cubano nacionalizado español y residente en Castellón. Especialista en salto de longitud, Lescay posee una marca personal de 8,35 metros al aire libre y obtuvo la nacionalidad tras casarse con una mujer de Burriana. Actualmente, vive entre Castellón y Guadalajara, donde entrena con Luis Felipe Méliz. Aunque su temporada invernal no ha sido brillante y aún no ha superado los ocho metros (7,95), buscará clasificarse a la final, para lo cual necesita alcanzar los ocho metros o estar entre los ocho mejores.
Por su parte, la valenciana Fátima Diame también competirá en Apeldoorn. Entrenada en Guadalajara por Iván Pedroso, ha tenido que lidiar con molestias en el talón durante el invierno, lo que la obligó a cambiar su pierna de batida. Gracias a la preparación que recibió en su juventud con Rafa Blanquer, ha logrado adaptarse al cambio, aunque sigue siendo un desafío. Esta temporada ha registrado una marca de 6,59 metros, ocupando la décima posición en el ranking. Para estar en la final del sábado, deberá alcanzar los 6,65 metros en la clasificación o situarse entre las ocho mejores.
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