«Ganar la ACB y no jugar la Euroliga es una locura. Los derechos se logran en la pista»

Fernando Romay (A Coruña, 1959) es uno de los mejores embajadores del baloncesto español. Por convertirse en uno de los símbolos de aquella generación dorada de los ochenta y por el amor al deporte de la canasta que desprende en casa frase que pronuncia. Todo un acierto que el salón internacional 'Basket Passion', que llenará de baloncesto Feria Valencia entre el 24 y el 26 de junio, haya pensado en su figura como estandarte.

-Una feria del basket se antoja como una oportunidad perfecta para vender mejor el producto.

-Soy de los que piensa que el baloncesto, si tiene que crecer de verdad, lo tiene que hacer desde fuera. La feria que se va a celebrar en Valencia me parece una iniciativa fantástica, bonita y que se debe apoyar.

-¿Ha vivido el baloncesto español demasiado acomplejado?

-Más que acomplejado diría que ha vivido acomodado durante muchos años. Queremos que todo el mundo se acerque a nuestro deporte y para eso hay que venderlo bien. ¿A tí el baloncesto que te supone?.

-Una pasión personal.

-Perfecto, esa pasión es la sentimos los que estamos dentro del baloncesto pero no tiene que ser la que sienta el resto de la gente. Vamos a acercarles el deporte y ponérselo más fácil. Una vez que se acerquen van a acabar sintiendo lo mismo que tú y que yo, porque el baloncesto es tan sumamente maravilloso que quedarán atrapados.

-Vamos que durante años ha sido demasiado endogámico, como un coto cerrado de expertos.

-Exacto. Es como los que ponen nombres modernos a cosas que existen toda la vida. Los del pick and roll o pick and pop... no hombre no, es un bloqueo y punto. Luego el jugador puede que continúe o que se abra pero no se lo pongamos tan complicado a la gente.

-¿Es frustrante que todos los jóvenes sepan quien es Kobe o LeBron y no quien fue Villacampa?

-Lo que es frustrante es que vas a hacer un campeonato en la calle y ves a los chavales con camisetas de la NBA. Intenta regalar a tu sobrino una camiseta de la Penya, vete a comprar una a ver si la encuentras. Eso lo primero y lo segundo será que seguro que te dice que la que quiero es la de Kobe Bryant. Valencia será una de las pocas excepciones que quedan en España. La de Ricky Rubio por ejemplo sí que la compran, pero no se compraban la de la Penya, sino la de ahora de los Wolves. Da que pensar y reflexionar sobre lo que tenemos que mejorar.

-¿Cómo se puede llegar a vender la 'moto' como hacen en la NBA?

-Hay que vender lo que venden ellos, la ilusión por los jugadores y por todo lo que tenga que ver en el juego. Y no olvidarnos de nuestra historia. En la presentación de Basket Passion teníamos a tres personas, Luengo, Rodilla y Montañana, que han sido grandes. Si preguntas fuera de Valencia nadie se acuerda de ellos. Muy pocos recuerdan por ejemplo a Rodilla, que fue un base magnífico que tuvo la selección en la plata del Eurobasket del 99 o que fue MVP de la Copa con el Pamesa.

-Vamos, una mezcla de tener cultura de baloncesto y saber vender.

-Hay que venderlo mejor, salir y desencorsetar la mente. Dejar de ser adanistas y pensar en la historia y en el futuro. No podemos ponernos exquisitos. Tenemos que aprender a vender el baloncesto como en la NBA. Allí el noventa por ciento de los partidos no valen para nada y todo empieza ahora en los playoff, pero te lo venden de una forma que estás enganchado desde noviembre.

-Las luchas de poder entre la FIBA y la Euroliga tampoco ayudan, ni las licencias para jugarla.

-Ganar la ACB y no jugar la Euroliga es una locura, que es lo que le puede pasar al Valencia Basket si lo logra. Los derechos se logran en la pista, no en los despachos. ¿Por qué tengo que ir por invitación si me lo he ganado?. Tenemos que volver a los 90, el que se lo ganaba jugaba.

-¿El acceso a la ACB también se ha encorsetado en exceso?

-En mi época si había un buen proyecto en Granollers, Huesca, Ferrol o Lliria estaba en la ACB, en Primera o como lo quieras llamar, porque el proyecto era bueno. Ahora hemos perdido el rumbo y se han quedado por el camino proyectos de baloncesto que merecían mucho la pena.

-¿Qué opina del Valencia Basket?

-El Valencia Basket tiene un proyecto que me encanta porque está basado en el baloncesto español. Tiene una serie de jugadores como Rafa Martínez, San Emeterio o Vives con presente y con futuro de primer nivel. Sólo le falta una cosa, que tenga algún jugador de cantera.

-No es un detalle pequeño ese.

-Es algo importante que me falta pero que quede claro que el proyecto me gusta. La guinda para ellos tiene que ser que todo ese movimiento de pasión en la Fonteta y en Valencia por el baloncesto se vea reflejado con la presencia de canteranos en el primer equipo. Me han contado el proyecto de LAlqueria del Basket y esa puede ser la semilla.

-¿Ve luchando a los valencianos por el título de la Liga Endesa?

-Sí, les veo luchando por lo máximo pero este año aún no se si les llegará en un playoff a cinco partidos con Real Madrid o Barça. Si la competición fuera la Liga Regular les daría como un valor seguro.

-¿Nos daremos cuenta demasiado tarde del nivel del baloncesto español que estamos viviendo?

-Cuando se retire esta generación seremos conscientes de lo que nos han dado. El ejemplo es Pau Gasol. Un jugador que lo ha conseguido todo y que cuando acaba de ganar un anillo de la NBA diga 'señores me voy a jugar con España', es impresionante. Nunca sabremos lo que le debemos a Pau Gasol, a su compromiso con la selección.

-Si la FIBA no lo impide, que todo puede pasar, el sueño del oro olímpico sería el final perfecto.

-El oro olímpico sería un broche para esta generación pero si algo he aprendido es a no exigir nada a este equipo porque se que siempre me van a dar el cien por cien. Prefiero tener los cinco sentidos enfocados a disfrutar del equipo.