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El sorteo de la Supercopa Endesa que se llevó a cabo este martes en el Palacio de San Esteban de Murcia deparó un clásico para abrir la temporada 2023-24 en el baloncesto español. El Barça, vigente campeón de Liga, y el Real Madrid, subcampeón en el torneo de la regularidad y defensor del título que se pondrá en liza en Murcia, librarán un duelo de altísimo voltaje el sábado 16 de septiembre, a las 18:30 horas, que servirá como puesta de largo para un curso que se perfila apasionante. UCAM Murcia, anfitrión del torneo, y Unicaja, ganador la pasada campaña de la Copa del Rey, disputarán la otra semifinal, prevista para ese mismo sábado, a las 21:30 horas. La gran final de la Supercopa Endesa se celebrará el domingo 17 de septiembre a las 20:00 horas y todos los partidos podrán verse en directo por televisión a través de Movistar+.
El Real Madrid de Chus Mateo pondrá en juego en el Palacio de los Deportes de Murcia el título que conquistó la temporada pasada tras imponerse por 89-83 al Barça de Sarunas Jasikevicius en la final que se celebró en el Palacio Municipal de Deportes San Pablo de Sevilla a finales de septiembre de 2022.
Ahora, con Roger Grimau al mando de una plantilla reforzada con los fichajes de los internacionales españoles Willy Hernangómez, Darío Brizuela y Joel Parra, aunque golpeada por la tempestuosa salida de piezas que resultaron capitales a lo largo de los últimos años como Nikola Mirotic, Kyle Kuric, Cory Higgins, Mike Tobey o Sertaç Sanli, además del canterano Sergi Martínez, los azulgranas tratarán de tomarse la revancha frente a un Real Madrid en el que la gran novedad es el regreso de Facundo Campazzo.
El base argentino, después de un periplo sin el brillo esperado en la NBA y unos meses en el Estrella Roja, volverá a enfundarse la elástica blanca para liderar a un equipo que ha perdido a Nigel Williams-Goss (Olympiacos), Adam Hanga (Estrella Roja), Anthony Randolph y Petr Cornelie (AS Monaco), pero que mantiene al núcleo duro que conquistó la última Euroliga en Kaunas.
Unicaja parte como favorito en la otra semifinal, tras sorprender el pasado curso a los transatlánticos del baloncesto español alzando la Copa del Rey en Badalona. Ibon Navarro sigue al frente de un equipo en el que son novedades Kameron Taylor (Bàsquet Girona) e Ilimane Diop (UCAM Murcia), pero que se ha visto duramente golpeada con la salida de Darío Brizuela al Barça.
Sin embargo, UCAM Murcia tratará de hacer valer su condición de local para plantarse en la final. El conjunto que entrena Sito Alonso se ha reforzado a fondo este verano con los fichajes de Ludde Hakanson (Surne Bilbao Basket), Dylan Ennis (Galatasaray Nef), Troy Caupain (Brescia), Howard Sant-Roos (Casademont Zaragoza), Rodions Kurucs (Strasbourg), Dustin Sleva (Löwen Braunschweig), Simon Birgander (Joventut Badalona) y Moussa Diagne (Lenovo Tenerife). En el capítulo de bajas figuran los nombres de Artem Pustovyi (Monbus Obradoiro), Urban Klavzar (Grupo Alega Cantabria), Tomás Bellas (Fuenlabrada) y Sadiel Rojas.
Será la primera vez en los últimos 25 años que Murcia acogerá un evento de la ACB, motivo por el cual el Ayuntamiento de Murcia hará una importante apuesta por la mejora y adecuación del Palacio de los Deportes, un recinto con capacidad de más de 7.000 espectadores y que, entre otros aspectos, reforzará la instalación de luz, sonido, vestuarios y el vídeo marcador para acoger el evento.
Murcia fue la sede en 1996 de la fase final de la Copa del Rey y en 1998 se celebró allí el fin de semana del All Star. Desde entonces, la ciudad no había disfrutado de un evento de este calado, un largo periodo de tiempo al que se pondrá fin justo cuando el UCAM Murcia ha cumplido 25 años en la élite, los doce últimos de forma consecutiva.
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